Lisboa: La ciudad más visitada de Portugal
Enamora a primera vista por sus fantásticos miradores, las emblemáticas casas en tonos pasteles, y sus calles empinadas y adoquinadas.
La capital de Portugal, se ha caracterizado por ser vibrante, moderna y conocida como la ciudad de las siete colinas (Santa Catarina, San Roque, San André, San Vicente, San Jorge, Santa Ana y Chagas), que se pueden observar desde el estuario del Tajo.
En cada colina se puede admirar Lisboa de una manera diferente. Turistas y residentes aseguran que, a través de ellas se conocen muchos secretos.
Dos días en Lisboa: Lugares que no puedes dejar de visitar
Barrio de Alfama
Es el más antiguo y típico de la capital. Está ubicado en una colina y es famoso por sus miradores como, Portas do Sol y Santa Luzia, en donde se disfrutan las vistas más espectaculares.
Continuando con el recorrido, está el Castillo de San Jorge, que se encuentra muy bien conservado, y fue palacio real hasta el siglo XVI.
Alfama es considerado el barrio más seguro de Lisboa, y es visitado por una gran cantidad de turistas diariamente. Es reconocido por sus restaurantes y festividades como la de San Antonio, que se celebra el 12 y 13 de junio.
Barrio Alto
Ubicado al frente del barrio de Alfama, se caracteriza por ser vanguardista y una de las mejores opciones nocturnas de la ciudad. Cuenta con una gran variedad de bares y restaurantes; para muchos es la zona más interesante de toda Lisboa.
Desde hace varios años ha ganado popularidad, convirtiéndose en un lugar con características atemporales, pero con mucha personalidad.
Una de sus paradas obligatorias, es el Jardín de San Pedro de Alcántara, que cuenta con un lago y un mirador, que ofrece una hermosa vista al este de la ciudad, incluyendo parte de la zona Baja de Lisboa y del margen sur del río Tajo.
Belém
Está situado en el estuario del río Tajo, y cuenta con muchos lugares que se han convertido en parada obligatoria para los turistas.
El Monasterio de los Jerónimos es uno de ellos, caracterizado por la mezcla del estilo gótico y renacentista.
Por otra parte, a pocos kilómetros se encuentra la Torre de Belém, reconocida por ser declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, cuya función es proteger la entrada de Lisboa por la zona del río.
La Antiga Confeitaria de Belém es una pastelería reconocida por sus pastelitos de crema, con masa de hojaldre y espolvoreadas con canela. Diariamente se hacen extensas filas para disfrutar de sus famosos dulce.
Pavilhão Chinês
Es un bar de los años 20, bastante llamativo por sus salas con miles de objetos, desde sombreros, soldaditos de plomo, una tetera de cerámica, un casco militar, botones, entre muchísimas cosas más.
Turistas que lo han visitado, aseguran que es un lugar con mucha historia que contar.
Esta es la mejor guía de viajes para conocer Lisboa, en dos días; y disfrutar de los lugares imprescindibles de esta hermosa ciudad.