La Mostra de Venecia a punto de convertirse en espacio de psicoanálisis
Dos películas notables se han presentado este jueves en la 76 edición del legendario festival, una que enfoca sobre el aislamiento y la soledad de un hombre en el espacio y la otra sobre una ruptura matrimonial dolorosa.
Brad Pitt se lanza a un viaje de ciencia-ficción de Ad Astra, del director James Gray, que se estrenará el día 20 de septiembre en España. Mientras los actores Scarlett Johansson y Adam Driver son los intérpretes principales de A Marriage Story, de Noah Baumbach, que se verá en el mes de diciembre por la plataforma Netflix.
Ambas películas son autorreferenciales, la incertidumbre de la soledad en el espacio, deviene de historias pasadas del propio director, de nostalgias provocadas por situaciones personales poco felices.
La historia del espacio gira en torno a la desaparición de un astronauta entre las estrellas. Años más tarde, resulta que quizás este vivo y Roy, su hijo, debe encontrar la respuesta al otro lado del universo.
Ad Astra esta lejos de ser una película épica del espacio para presentarse como una visión interior de necesidad de descubrir quién es uno mismo. Cierta similitud con El corazón de las tinieblas o 2001: Odisea en el espacio, de Kubrick, para imaginar cómo se siente un pequeño ser en la inmensidad del infinito solitario.
Un sentimiento de desasosiego difícil de traspolar al espectador, pero logrado mayormente por la gran fantástica interpretación de Pitt, un hijo que se va a la aventura para encontrarse con sí mismo y su propia historia.
A Marriage Story, es la historia friccionada del divorcio del Baumbach y la actriz Jennifer Jason Leigh. Situación personalizada que este destacado director se ha animado a contar exponiéndose a rememorar situaciones poco felices, y como el mismo contó, lo obligaba muchas veces a salir y tomar aire, durante el rodaje.
La historia del divorcio es dolorosa, el amor se termina. A pesar de la admiración y respeto mutuos, eso no es suficiente y caen en el fracaso, porque las virtudes individuales no bastan para construir una relación de a dos. Lejos de caer en lugares comunes, el relato es muy emotivo, las actuaciones sobresalientes y el resultado final ha sido fantástico.