Coronavirus: Hombre da positivo a pruebas realizadas por 232 días
El caso ha sido documentado por especialistas de la Universidad de São Paulo (Brasil), la Fundación Oswaldo Cruz (Brasil) y el Instituto Pasteur (Francia).
En la revista científica Fronties of Medicine, se publicó un artículo en el que se mostró este caso particular en el que un hombre de 38 años, dio positivo a Covid-19 durante 232 días.
Marielton dos Passos Cunha, el primer autor del artículo antes mencionado, comentó que rastrearon 38 casos, de los cuales dos hombres y una mujer presentaron continuamente el virus en su organismo.
Esta no forma parte de la primera evidencia de que el Covid-19 permanezca activo durante un tiempo prologado, incluso en pacientes con sintomatología leve. En el 2021, investigadores brasileños notificaron casos similares.
Coronavirus es capaz de replicarse in vitro
En el estudio se analizaron 29 muestras de secreción nasofaríngea. Estas provenían de pacientes positivos en la prueba Covid-19, después de diez días de aparición de los primeros síntomas y fueron inoculadas en células cultivadas en un laboratorio.
Mediante este estudio, se pudo observar que los virus presentes eran capaces de replicarse in vitro al infectar las células.
Por lo tanto, las personas pueden infectarse al tener contacto con gotas de salivas expulsadas, al momento de la toma del material.
La persona que tenga un sistema inmunitario comprometido, suele correr mayor riesgo. Los investigadores describen un caso de contagio que duró 218 días, en una persona de 40 años, quien se había sometido a un fuerte tratamiento contra el cáncer, antes de contagiarse.
A principios de diciembre del 2020, un informe publicado en la revista New England Journal of Medicine, se mostró un caso de un hombre de 45 años, inmunodeprimido con trastorno sanguíneo autoinmune, en el que el virus permaneció por 143 días continuos.
Asimismo, se conoció el caso de un paciente con leucemia, que no presentaba síntomas, y aún así el virus lo tuvo por 70 días. En el estudio, la diferencia entre hombres y mujeres no fue llamativa, en cuanto al tiempo de duración de la actividad viral.
Los casos más importantes
En los 3 casos atípicos, el virus se mantuvo por 81 días en uno de los dos sujetos y 71 días en la mujer. Ninguno de los pacientes presentaba enfermedades secundarias, y tenían síntomas leves de Covid-19.
El otro de los tres pacientes, continuó dando positivo por 232 días (desde abril hasta noviembre del 2020). Este paciente tiene VIH desde el 2018. Sin embargo, no presentaba carga viral por la terapia antirretroviral.
Paola Minoprio, una de las líderes de la investigación, aseguró que al ser seropositivo para el VIH, no quiere decir que sea susceptible a otras infecciones, porque la persona ha estado en terapia desde su diagnóstico.
La capacidad de respuesta a otra infección es como la de cualquier persona, incluso, esta vez su cuerpo respondió al ser infectado por Coronavirus.
Minoprio aseguró que este paciente no está inmunodeprimido como los pacientes con enfermedades autoinmunes, los pacientes con cáncer o los trasplantados.
Seguimiento especial en este particular caso
Los investigadores demuestran que la condición no expresaba la duración prolongada de la infección por Coronavirus.
Se tenían que hacer comparaciones entre pacientes infectados por el VIH y el SARS-CoV-2, junto a un grupo de control especializado para determinar algún rasgo genético inmunitario en la persona, que pueda estar asociado a la excreción viral prolongada.
Todas las semanas se le realizaban pruebas al paciente, en la que detectaron la persistencia de la infección y se percibieron muestras continuas del virus, en el que demostraba que no se trataba de un caso de reinfección, y que no se replicaba, simplemente mutaba.
Por este motivo, decidieron diseñar ciertas estrategias que posteriormente fueron utilizadas por el coronavirus para evitar el sistema inmunitario en la infección, al determinar que la carga viral descendía al momento de aumentarlos anticuerpos neutralizantes.
De esta manera, se burlaban las defensas del organismo para seguir acumulándose. Este ciclo se seguía repitiendo, ocasionando así el refuerzo de la producción de más anticuerpos, hasta reducir la carga viral nuevamente.
Cunha insistió que es necesario la constante observación a este tipo de pacientes, ya que se pueden aprender un poco más de la mutación del virus, y cuáles mutaciones pueden ocasionar variantes preocupantes.
Este paciente estaba infectado por el linaje B.1.1.28, conocido como P1. Este ingresó a Brasil a inicios del 2020. Los especialistas no descubrieron mutaciones en el virus que justificara su clasificación, como más contagioso o con mayor resistencia al sistema inmunitario.