Canelones de pollo
La receta de canelones de pollo es una excelente manera de disfrutar de las propiedades del pollo en una cena o almuerzo delicioso para toda la familia. Esta, pese a ser un poco larga, en realidad es muy sencilla e ideal para quienes no son muy expertos en la cocina.
A continuación explicaremos esta receta de manera sencilla, detallando paso a paso el procedimiento a realizar. Al final de la receta, podrá sorprender a todos con este exquisito plato.
Ingredientes de los canelones de pollo:
800 gramos de pollo.
Una cebolla.
Dos hojas de laurel.
Dos dientes de ajo.
Un vaso de vino blanco, coñac o cerveza.
Pimienta negra al gusto.
Sal al gusto.
Tres cucharaditas de aceite de oliva extra virgen.
30 placas de canelones.
150 gramos de queso rallado.
500 ml de leche.
40 gramos de mantequilla.
500 ml de leche.
Nuez moscada al gusto.
Consejos y recomendaciones antes de iniciar la receta
Para que le resulte más sencilla la preparación del pollo, lo ideal es dividir el pollo en octavos. Es decir, dividir los trozos de pollo en seis raciones.
Pasos a seguir para la preparación de la receta de canelones de pollo
Nota: Debido a que la receta es un poco extensa, la secuencia de pasos se dividirá por partes.
Para la preparación del pollo
Reúna todos los ingredientes.
Sazone las 6 piezas de pollo con sal y pimienta al gusto.
Llevamos las piezas de pollo al fuego, colocando una sartén a fuego medio y añadimos el aceite de oliva. Una vez el aceite este caliente, colocamos el pollo en la sartén, tapamos y dejamos cocinar solo hasta que esté un poco dorado.
Cuando el pollo esté ligeramente dorado por una vuelta le damos la vuelta y dejamos cocinar hasta que esté dorado por el otro lado. Lo ideal es que el pollo se mantenga crudo por dentro y un poco dorado por fuera.
Pique las cebollas en julianas y añádalas a la sartén.
Corte los ajos en láminas y añádalos a la sartén.
Añada también las hojas de laurel.
Déjelos un par de minutos al fuego para dejar que los ingredientes recién añadidos se cocinen.
Cuando note las cebollas en punto caramelizado, añada el vino y deje que se cocinen los ingredientes tapados en la sartén durante media hora. Recuerde mover el pollo para que las piezas se cocinen por ambos lados.
Una vez guisado el pollo, se deja enfriar para preparar el relleno.
Para la preparación de la salsa bechamel
En una sartén que esté a fuego medio, añada la mantequilla, una cucharada sopera de harina de trigo, y con ayuda de un batidor mueva estos ingredientes hasta que la harina se tueste.
Añada una pizca de pimienta y una pizca de nuez moscada rallada.
Antes de que la harina comience a tomar color, agregue la leche poco a poco. Lo ideal es bajar el fuego al mínimo para este paso. Mientras añade la leche, remueva bien la mezcla.
Agregue una pizca de sal al gusto.
A fuego lento, vaya removiendo la mezcla de salsa bechamel.
Una vez que la salsa comience a hervir la salsa estará lista, en este caso retire la sartén del fuego. No importa si la salsa está muy clara, pues esta espesará cuando se enfríe.
Para la preparación de los canelones
Retire la piel y el hueso del pollo y deje solo la carne del mismo.
Pique o triture la carne del pollo cocido y añada la salsa de guiso para que quede jugosa. Recuerde pasar la salsa del guiso por un colador para evitar que queden grumos.
Añada un poco de salsa bechamel a la carne del pollo triturada, a fin de que quede aún más jugosa. En caso de que la salsa bechamel quede muy espesa, puede agregar un poco de leche.
Una vez que tenga una consistencia deseada de la carne, es decir que sea manejable y jugosa, tápela y reserve.
Coloque una olla al fuego alto con suficiente agua y añada sal. Una vez que el agua hierva, añada los canelones uno a uno. Siga el tiempo de cocción que indique el fabricante para los canelones, pues este varía según la marca.
Mueva los canelones mientras hierven para evitar que se peguen.
Una vez cocidos, retire el agua caliente y añada agua fría para cortar la cocción.
Extienda cada canelón en un trapo limpio, séquelas un poco con un trapo de cocina. Tome el relleno y coloque una cucharada de este sobre cada placa de canelón. Recuerde darle una forma alargada al relleno para que le sea más sencillo de enrollar.
Enrolle cada uno de los canelones dejando la parte del cierre hacia arriba.
Coloque los canelones en una bandeja para gratinar.
Cubra los canelones con la salsa bechamel y extienda el queso rallado encima de la salsa.
Lleve los canelones al horno frío y encienda el horno a 220º F por un par de minutos o hasta que note que el queso está dorado.
Saque del horno los canelones, sirva y disfrútelos calientes.
Consejos adicionales para una receta de canelones de pollo perfecta
Puede preparar la pasta o mezcla del relleno con anticipación antes de proceder a realizar la receta, pues esta se mantiene bien conservada hasta por un día en la nevera. También puede preparar con anticipación la salsa bechamel.
Para la realización de la salsa bechamel, lo mejor es usar una sartén antiadherente con un batidor que recubierto, el cual evite que su sartén se ralle.
Para refrigerar los canelones sobrantes, extienda papel transparente sobre una bandeja y coloque los canelones sobre esta dejando espacio de medio centímetro entre ellos. Posteriormente, cúbralos con papel transparente y lleve la bandeja al congelador.
Para evitar que la mezcla de pollo se dañe mientras la reserva en el congelador, tape el recipiente con papel transparente o una tapa.
Intente también probar esta receta con otro tipo de carnes, como res, cochino o hasta pescado. Ponga su imaginación a volar y prepare esta receta como mejor le parezca.