Evita estos 5 alimentos para resguardar la salud de tus huesos

La mayoría de las veces que tocamos aspectos nutricionales en nuestra vida, casi siempre nos enfocamos en las afecciones ocasionadas al corazón o a la circulación, obviando los daños que algunos alimentos pueden causar a nuestros huesos.

La realidad es que muchos comenzamos a preocuparnos por la salud de nuestros huesos solo cuando alcanzamos una edad más avanzada, lo cual es un error. Puesto que existen algunos alimentos específicos, que además de ser bastante adictivos, llegan a ser muy malos para ellos.

No esperes a que comiencen aparecer dolores y malestares, para colocarle un alto a aquellos alimentos que atacan su masa ósea. Por ello, aquí te presento a los peores enemigos de la salud de tus huesos.

5 alimentos que más afectan los huesos

Son muchos los alimentos que puedes ingerir para fortalecer tu estructura ósea, pero en cuanto a los que debes evitar, la lista es corta.

Ten en cuenta, que la reducción de la ingesta de estos alimentos es un poco complicada de afrontar, por lo fácil que es acostumbrarnos a ellos. Por eso, si vas a cuidar tus huesos, controla los siguientes.

1. Café

Estudios realizados hablan sobre sus beneficios y contradicciones, aunque por lo general, es más lo que aporta. Pero, en cuanto a los huesos, es bastante dañino si se consume en exceso.

Dentro de los componentes del café, existe una sustancia conocida como xantinas, la cual perjudica la estructura ósea.

Esta provoca que el calcio, que se desecha mediante la orina, sea mucho mayor. Estudios afirman que los osteoblastos se ven afectados por el consumo de cafeína, lo que interfiere con la regeneración de los huesos.

Por otra parte, el café también impide que la recolección de calcio, efectuada por el intestino, sea completamente eficiente.

Una ingesta de café continua y en exceso, podría contribuir notablemente a la aparición de enfermedades como la osteoporosis.

2. Alcohol

Existen muy buenas razones para cuidar nuestro consumo de bebidas alcohólicas, pero en lo que se refiere a los huesos, la importancia de reducir la ingesta, se debe a que aumenta la salida de calcio de nuestro organismo por medio de la orina.

Cuando las personas han desarrollado un consumo excesivo de alcohol desde su juventud, esto los hace más propensos a sufrir osteoporosis. La fuga de calcio que provoca en el organismo, hace que la calidad de los huesos sea mucho menor, y por ende, más débiles.

Por otro lado, no podemos ocultar que las personas en estados de ebriedad, tienden a tener más accidentes, provocándose lecciones que le perjudican gravemente a sus huesos.

3. Refrescos y gaseosas

Las dulces, refrescantes y coloridas gaseosas poseen su lado oscuro, y cuando se trata del daño a los huesos, podemos culpar a un componente en ellas, llamado ácido fosfórico. Este elemento provoca que la absorción de calcio no se genere con total eficiencia.

Por otro lado, también se ha señalado que ocasiona el aumento en la acidez de la sangre, haciendo que la calidad de los huesos se debilite. Y si lo vemos a la luz de patologías asociadas, si existe sobrepeso, esto también forzara el funcionamiento de los huesos.

4. Sal

Es uno de los condimentos más útiles y necesarios de cualquier cocina, el cual da el toque especial a muchos platos. No hay problema con ella si se consume prudentemente, pero su ingesta excesiva ocasiona que la densidad de la masa ósea sea menor.

Al igual que otros alimentos mencionados anteriormente, esta provoca una pérdida notable de calcio, al aumentar su ritmo de salida del cuerpo.  Por lo tanto, esto también aumenta el riesgo de sufrir osteoporosis.

El problema con la sal, es que la mayoría de la que consumimos, no vienen de nuestras cocinas, sino de alimentos procesados, en las que el tipo de sal que se utiliza es mucho más dañina.

5. Carne roja

Es deliciosa y necesaria, por ser una rica fuente de proteínas, pero no quiere decir que comerla en exceso favorezca. La carne roja es otro de los contribuyentes a la mala absorción del calcio en nuestros huesos.

Esta también provoca que el cuerpo deseche más calcio del que debería, y esto afecta negativamente la fortificación ósea.

Se ha comprobado que los pacientes que regulan su consumo, gozan de huesos más fuertes y saludables. Teniendo en cuenta que existen otros tipos de carnes más nutritivas para sustituirlas.

¿Por qué debo preocuparme más por mis huesos?

En la etapa de la niñez y juventud la salud ósea no es algo que posea mucha relevancia, y esto ocurre porque no se llega a comprender la magnitud de la utilidad y funcionamiento de todo el organismo.

Sin embargo, para que le des mayor importancia a estos, te enseño las razones para cuidar más de tus huesos.

Movilidad

A medida que envejezcamos, una buena salud ósea será el factor determinante que va a influir en nuestra capacidad de desplazamiento.

En las personas que sufren de enfermedades como descalcificación, sus movimientos son bastante reducidos.

 Dolor 

Entre más débil sea la masa ósea, más propensos estamos a sufrir fracturas y lesiones, que con el tiempo ocasionan dolores recurrentes.

Cuando los huesos son débiles, elementos como el frío, provocan fuerte dolor en diversas áreas, siendo las más comunes las rodillas.

Fortificación

Los huesos, a diferencia de otros elementos del cuerpo, tardan mucho más para ser fortalecidos y optimizados.  

Se puede hacer un cambio en la masa corporal con unas pocas semanas de ejercicio, pero para fortalecer los huesos, el tiempo es mucho mayor.

No cometas el error de esperar hasta llegar a anciano para preocuparte por el calcio y el estado de tus huesos, si adecuas tu nutrición desde joven, los años serán mucho más amables contigo.

Procura comer sano, haz ejercicio con regularidad, aléjate de los malos hábitos y recuerda que ningún exceso contribuye a la salud.

Los alimentos que desglosamos, no representan peligro alguno si se consumen prudentemente, puesto que, el verdadero problema no está en ellos, sino en como tú decidas cuidarte.