Deportación exprés: EE. UU. inicia proceso de deportación masiva de inmigrantes
El gobierno de Estados Unidos ha iniciado el proceso de deportaciones exprés, tras entrar en vigencia las nuevas normas de inmigración en el país. De esta manera, todo inmigrante indocumentado que lleve menos de 2 años ininterrumpidos en EE. UU., podrá ser deportado de manera inmediata.
El día de hoy se estaría publicando la gaceta oficial donde se declaren las nuevas normas contra inmigrantes indocumentados. De esta manera, se espera que una gran cantidad de este tipo de individuos sean deportados sin previo aviso y sin pasar directamente por los tribunales de dicho país.
Este sería un proceso que busca hacerse frente al terrible caso de inmigrantes mexicanos que llegan a la frontera con EE. UU. todos los días. Así, se buscaría acelerar todo el proceso de tratamiento hacia los más de 900.000 inmigrantes pendientes de ser evaluados por la ley estadounidense.
Kevin McAleenan, secretario del Departamento de Seguridad Nacional, así lo señaló cuando se refirió a estas nuevas normativas como un intento de confrontar la "crisis actual en la frontera sur". Por ello, se espera que el caso de inmigraciones ilegales pueda ser frenado finalmente en el territorio de Estados Unidos.
La Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU) señaló que impondrán una demanda ante dichas medidas, las cuales pondrían en riesgo la salud de los inmigrantes y de toda su familia:
Los inmigrantes que han vivido en el país durante años contarán con menos protección que cuando se juzgan infracciones de tráfico. El plan es ilegal, punto.
De igual manera, Jennifer Minear, presidenta de la Asociación Americana de Abogados de Inmigración (AILA), señaló que este tipo de actos va en contra de la integridad y los derechos de los inmigrantes:
La deportación acelerada otorga a los agentes de Inmigración una autoridad casi total para detener, emitir juicios y expulsar a alguien de este país. Ahora el DHS busca aplicar ese poder en todo el país, sometiendo a miles de personas a la deportación sin una oportunidad significativa de recopilar pruebas, consultando con un abogado o compareciendo ante un juez.
Por todo esto, la tensión en Estados Unidos se ha vuelto a presenciar, viendo dos grupos polarizados ante la decisión del gobierno de Donald Trump por deportar a los inmigrantes ilegales, sin que estos tengan el derecho de ir a los tribunales para exponer sus casos.