7 trucos y consejos para que tus hijos participen en las actividades del hogar
La participación de los más pequeños de la casa en las tareas diarias es más que una ayuda para sus padres, se trata de formar su personalidad, de crear ciudadanos de bien y enseñarles que en la vida siempre se tendrán deberes y responsabilidades que cumplir.
Pero de entrada, siendo niños, no se les puede exigir como una responsabilidad que los convertirá en adultos con sus deberes establecidos, conviene usar algunos trucos para hacerlo más divertido y por supuesto, para convencerlos de participar en las actividades que tengamos pendiente en el hogar.
Truco #1 Hazlo divertido con imaginación
Para esto se vale de todo. A tu pequeño le gusta el baloncesto, entonces meter la ropa sucia a la lavadora puede convertirse en un pequeño entrenamiento donde lo retes a meter 3 prendas seguidas desde 1 metro de distancia. Despreocúpate, si alguna cae al suelo, él la recogerá, se estará divirtiendo y no le importará cubrir el reto 1, 2 o 5 veces e incluso mejorarlo.
Truco #2 En familia
Desde sus primeros años, tus hijos querrán imitarte y seguramente incluso estar cerca de ti para hacerlo, no es raro ver a chicos apoyados en una pared al lado de su padre imitando su postura, para ellos es normal, eres su primera referencia y ejemplo del mundo.
Por eso, siempre es más provechoso estar a su lado y lavar los cubiertos juntos, además de ese modo le enseñas que hay cosas que ellos no pueden tocar siquiera para lavarlas como cuchillos, peladores de papa y otros utensilios.
Truco #3 Cuida la dificultad de los que haceres
Está bien aprovechar para ir desarrollando sus cualidades, pero no puedes encargar a tu niña de 5 años que aprenda a utilizar todo el ciclo de la lavadora, en el aprendizaje podría frustrarse, no es algo acorde a su edad.
Trata de que siempre sea divertido y fácil, no salgas de esas dos líneas, es una responsabilidad pero ante todo son niños, que nunca se olvide.
Truco #4 Recoger los juguetes es un comienzo
Debe recordarse que son niños, puede que recoger sus juguetes en su cuarto sea algo básico que debemos enseñarle, pero al comienzo, en sus primeros años de vida, podemos felicitarlos por ello al contribuir en la limpieza de la casa.
Al sentir que recogiendo los juguetes, haciendo algo tan sencillo, ayudan a mamá, estimulamos que lo hagan de manera constante sin necesidad de recordatorios.
Truco #5 Usa adhesivos o pegatinas
Si es hijo único, se sentirá orgulloso al crearle una especie de cuadro de honor con estrellas por cada acción que realice.
Diseña tu propio sistema, pueden ser flores si es una niña. Lo importante es que te diseñes una página que colocarás en la nevera o en otro sitio visible, donde irán las pegatinas que se ganarán por sus acciones.
Los chicos luego lo presumen ante sus primos o las abuelas o tías al visitarles. Si son varios hermanos, entonces habrá una sana competencia por hacer quehaceres y tener más pegatinas, algo totalmente positivo.
Truco #6 Colocar la ropa, zapatos y mochila en su lugar
Todo puede formar parte de los deberes y en los primeros años de colegio, es vital que aprendan a que no deben quitarse el uniforme y dejarlo tirado en el sofá ni lanzar la mochila en la mesa del comedor.
Estos años serán vitales en la formación de su perfil como personas y esto debes tratarlo como un deber vital. Los niños deben y pueden aprender desde pequeños a colocar la ropa sucia, los zapatos y su bolso de clases donde debe ir.
Truco #7 Los más grandes también deben aportar
Aunque suene a regaño, es la verdad: Mientras los chicos vivan bajo el techo de sus padres deben tener responsabilidad y es tú deber como padre asegurarte de que así sea.
Lavar el coche es algo que los chicos de 11 o 12 años ya pueden hacer, al comienzo debes estar presente para que inicien ayudándote, luego podrán hacerlo solos.
Sacar la basura también es algo que puedes permitirlo. A esa edad o pocos meses/años después querrán visitar a un amigo y jugar videojuegos, esas salidas pueden ser un premio por realizar sus labores del hogar.
Si no quieren realizarlas (y siempre se presentará algún momento de rebeldía), no discutas con ellos ni trates de forzarlos, el castigo será limitar sus salidas, horas de videojuegos y televisión, sin nada más que ello, pronto querrán volver a ayudar.