Se cumplen diez años de la tragedia de Once en Argentina
Este martes se cumplieron diez años de la fatídica mañana del 22 de febrero del 2012 cuando ocurrió el accidente ferroviario más grave de la historia de Argentina, a saber un tren chocó contra el andén de la estación Once, una de las más concurridas del país. Debido al accidente 52 personas murieron y 789 resultaron heridas.
Sin duda, fue un trágico evento que luego de diez años sigue dejando recuerdos lamentables en los argentinos y que a partir de ese momento, la justicia del país sudamericano ha procesado a varios implicados en esos hechos.
Investigaciones y juicios
Las investigaciones concuerdan que de los ocho vagones del tren, seis tenían los compresores de aire comprimido para poder maniobrar los frenos. De la misma manera, siete vagones no habían tenido mantenimiento en mucho tiempo y prueba de ello es que a los paragolpes no les funcionaba el sistema hidráulico.
También Marcos Córdoba, quien fue el maquinista, confesó que había desactivado el sistema de frenado de hombre muerto, mecanismo que se activa si el maquinista queda inconsciente. Los frenos manuales sí funcionaron, sin embargo, no pudieron detener el desastre.
Por otra parte, los ocho vagones se agolparon entre sí, pero la peor parte se la llevaron los dos primeros que quedaron destruidos completamente. Cabe destacar que toda esta información fue suministrada por la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ).
Otro dato suministrado es que el tren era perteneciente a la concesionaria Trenes de Buenos Aires (TBA), matrícula 3.772 y chapa 16, que cubría un trayecto de la línea Sarmiento.
La investigadora Candela Hernández también aportó datos valiosos en un artículo académico:
La formación que chocó en Once había sido fabricada en 1958 y no recibía mantenimiento efectivo, salvo el indispensable para circular, desde el 2000-2001. Además, dentro del tren había un hacinamiento de 7,5 personas por metro cuadrado, por encima de las 5 personas estipuladas como máximo.
En cuanto al juicio a cargo del juez Claudio Bonadío del 18 de octubre de 2012, 22 personas fueron condenadas a prisión, entre ellas Julio de Vido, exministro de Planificación, Juan Pablo Schiavi y Ricardo Jaime, ex secretarios de Transporte y Marcos Córdoba, el maquinista.
El juicio oral se efectuaría en marzo de 2014, con más de 135 audiencias y en donde fueron citados más de 200 testigos. 28 personas imputadas, de las cuales estaban los ya mencionados Juan Pablo Schiavi y Ricardo Jaime, el primero fue el secretario de Transporte al momento de la tragedia, y el segundo fue su antecesor.
El maquinista Marcos Antonio Córdoba, como también los hermanos Mario y Claudio Sergio Cirigliano, dueños de TBA, figuraron también entre esos imputados.
Entre las sentencias emitidas por el Tribunal Oral Federal 2 en 2015, Sergio Cirigiliano obtuvo una pena de 9 años de prisión, Schiavi 8 años (que luego se redujo a 5 años y seis meses), Jaime de 6 años (luego se le aumentó a 7 años) y Córdoba de 3 años y 3 meses.
Básicamente, la responsabilidad estaba compartida por los funcionarios públicos, el maquinista y la empresa concesionaria. Para Paolo Menghini, padre de una de las víctimas, el tren “tenía 60 años sobre las vías, sin ningún tipo de sistema de seguridad. Esta tragedia se pudo haber evitado”, aseveró.
Cabe destacar que un segundo juicio se llevó a cabo en 2018 en donde se condenó al exministro de Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios, Julio de Vido, a cinco años y 8 meses de prisión porque dentro de sus funciones estaba el supervisar la gestión de TBA, lo que no hizo.
Hace 10 años…
A las 8:32 de la mañana del 22 de febrero, un tren que llevaba a 1.500 personas chocó contra el parachoques del andén en la plataforma n°2 de la estación de Once, encontrada en el centro de la ciudad de Buenos Aires, a una velocidad de 20 kilómetros por hora.
Es de hacer notar, que al entrar a una estación, los trenes deben ir a 4 o 5 km por hora, lo cual indica entonces que no había podido frenar o no funcionaron correctamente. Después del accidente los rescatistas trabajaron durante más de 24 horas, cuyo trabajo se vio hasta internacionalmente, dándole la vuelta al mundo.
Como consecuencia de este accidente se evidenció el deterioro del sistema de trenes de la ciudad de Buenos Aires y a partir de ese momento se llevaron a cabo reformas al sistema de transporte.
Cabe destacar que también en junio de 2013 dos trenes chocaron en Castelar, que es provincia de Buenos Aires, donde murieron tres personas y cientos resultaron heridos. También en octubre del año 2013 otro tren chocó de nuevo en el andén de Once donde hubo decenas de personas heridas.