Breadcrumbing: Descubre si vives de migajas de amor

Para muchos el término breadcrumbing es totalmente desconocido, pero seguramente han experimentado sus efectos en algún momento. Dentro del enmarañado mundo de las relaciones amorosas, se le cataloga con este nombre a una práctica muy insana.

El breadcrumbing conlleva a acciones bastante crueles donde solo alguien se beneficia del amor y la atención del otro, lo que deteriora cada vez más las relaciones amorosas. La interacción tecnológica y las redes sociales facilitan más el trabajo para quien lo practica.

Una relación bajo los términos que emplea el breadcrumbing es toda una tortura sentimental, aunque muchas personas no llegan a notarlo. Y para que esto no te pase, descubre todo lo relacionado con el breadcrumbing y cómo evitar caer en las garras de quien lo practica.

Definamos qué es breadcrumbing

Este término es una referencia a “dejar migajas” como en el caso de las migajas de pan, hablando en términos físicos. Pero, psicológicamente, se refiere a personas que alimentan falsas esperanzas en otra para obtener atención sin intención alguna de compromiso.

Su idea se basa en ejecutar acciones sutiles que mantengan el interés de la otra persona sobre ellos de manera activa. Esto es una práctica egoísta, ya que la persona, no posee interés en establecer nada serio, pero tampoco quiere que la otra persona se aleje.

La atención que se brinda es ejemplificada con migajas, puesto que solo son pequeñas dosis de cariño, como un alago, un beso, una conversación, un detalle o una reacción en redes de manera esporádica, para hacer creer a la otra persona que tiene esperanza.

Muchos jóvenes practican esto como medio de elevar su autoestima, pensando que el poder lograr que otros se interesen en ellos los hace más especiales. En la mayoría de los casos el breadcrumbing no termina nada bien y quien más sufre es el engañado.

¿Qué origina el breadcrumbing?

Este conflicto no debe su origen a distorsiones psicológicas profundas, como algunos problemas mentales. Pero sí podemos apreciar algunos factores que motivan a la ejecución de aquellos que los practican, y estos son los siguientes.

Ser egocéntrico

Las personas con un ego demasiado alto fácilmente llegan adoptar esta práctica, ya que les encanta tener la atención de otros. Quien posee este problema le resulta atractivo tener varias conquistas girando en torno a él, sin estar comprometido con ninguna.

El ego, ciega a quien lo posee en exceso, haciendo que ignore el daño que provoca. En su afán por recibir admiración, puede mantener a una o varias personas bajo su control, solo para realzar sus dotes de conquista y seducción, ante los ojos de los demás.

Miedo a expresar los sentimientos

Al otro extremo del ego, está el miedo sentimental, donde las acciones ya no son movidas por un interés tan insano, sino más bien por el temor a herir o dañar a otros. Este caso es muy común, debido a que mucho les cuesta ponerles fin a las relaciones.

Hay quienes sostienen relaciones a costas de migajas, pero nada más es debido a que no tienen la suficiente valentía para colocarle fin. No expresan sus sentimientos con claridad y por momentos alientan a la otra persona, haciendo que el breadcrumbing exista.

¿Por qué las redes sociales facilitan el breadcrumbing?

Esta práctica no es nueva dentro del mundo de las relaciones amorosas, únicamente que antes, el contacto era mucho más directo y presencial. Años atrás se requerían gestos, miradas, detalles y muchas otras tácticas para despertar el interés de alguien, pero ahora no.

Si entras al perfil de la red social de cualquier persona, rápidamente obtienes mucha información sobre ella, datos personales, gustos y mucho más.

Por otra parte, las reacciones a las publicaciones han creado su propio lenguaje en cuanto a escalas de interés.

Es muy fácil mantener una o varias relaciones afectivas a costa de migajas estando a distancia e interactuando de manera intermitente. Esta práctica se ha extendido grandemente entre la juventud, por lo que se hacen más difíciles las relaciones duraderas.

¿Cómo enfrentar al breadcrumbing si lo estoy viviendo?

A menudo quien sufre del breadcrumbing no nota que está siendo víctima de alguien, y es regularmente un tercero quien le hace dar cuenta. Si este es tu caso o si lo identificaste por ti solo, debes hacer lo siguiente para enfrentar el problema.

• Encara la situación: Habla con la otra persona y exígele de manera franca que te defina cómo ve su relación y cuál es el futuro que espera de ella.

• Procura un encuentro presencial: En las redes se pueden pensar y evaluar las respuestas con mucho detenimiento, únicamente en persona y mirando a los ojos notamos las verdaderas reacciones.

• No caigas en promesas: Exige acciones contundentes y sin demoras si se quiere mantener la relación. Algunos piden tiempo o prometen tener decisiones claras más adelante, pero solamente es una estrategia para seguir el juego.

Identifica el breadcrumbing

No es tan sencillo crear un estándar para quien practica el breadcrumbing, ya que cualquiera podría confundirse al inicio de una relación. Pero existen algunos tips que te pueden servir para evaluar a tu conquista y saber si es real o está jugando.

Frecuencia en las interacciones

Normalmente, cuando el interés es genuino, es bastante frecuente la interacción, ya sea presencial o en redes. No existe un contacto esporádico, sino continuo, y no se limita a pequeñas dosis de cariño, sino que busca, cada vez más, hacer más notorio su afecto.

Intenciones bien definidas

Quien practica breadcrumbing no deja claro cuáles son intenciones con la relación, basa su interacción en la atracción y el coqueteo, pero no aborda temas con seriedad.

Por otra parte, si el pretendiente es genuino, utiliza palabras contundentes que definen lo que quiere. No teme a hablar del futuro ni a idear planes que los involucren a ambos a largo plazo.

A menudo son narcisistas

La gran mayoría de los que practican breadcrumbing tienen inclinaciones narcisistas, esto los hace expresarse y hablar mucho acerca de sí mismos y de sus logros y se interesan poco en el otro.

Fingen un falso interés, pero solo es para atraer tu atención hacia ellos.

Temen al contacto presencial

Son muy buen partido tras la pantalla, pero le temen a verse cara a cara, por lo general, evitan y posponen las citas y las salidas.

Otros tienden a comportarse de una manera en las redes y con otra actitud al estar en persona, a veces por temor a la opinión externa.

El breadcrumbing es sin duda una de las peores estafas amorosas que se puede vivir, así que ten mucho cuidado y mantente alerta para que no te vuelvas víctima de aquellos que lo practican. Ten muy claro que el amor nunca será cosa de juego.