5 pasos efectivos para comenzar tu transición capilar
Actualmente, se ha incrementado el número de mujeres que apuestan por lo natural, convirtiendo los afros y melenas crespas en una total tendencia. Esto cada vez impulsa a diferentes mujeres a cambiar su look, pero para ello, necesitan comenzar una transición capilar de liso-rizado.
El hecho es que después de años de planchas y productos que lo mantenían estirado y sedoso, el transformarlo no es algo que se consiga de manera rápida. Las ondas no se forman y no cuentan con volumen, viéndose de este modo desaliñado
No obstante, estás en el lugar indicado para aprender a cómo comenzar este nuevo viaje. Es este sentido, te mostraré los pasos que necesitas para llegar a esa encantadora melena natural.
¿Qué hacer en una transición capilar?
El cabello liso y el rizado son dos polos opuestos, y el llegar de un extremo a otro requiere de tiempo, constancia y mucha paciencia, mientras aplicas los siguientes pasos.
1. Desecha los productos químicos
Mientras buscabas sedosidad, eliminar el friz y el volumen, recurrías a diferentes elementos químicos. No obstante, ya en este punto en donde anhelas la naturalidad, debes olvidarte de estos productos para siempre.
Estos son un obstáculo para el progreso de los rizos. Además, que muchos de ellos resecan el cuero capilar y dañan las hebras, efecto que va en contra de las bases de un rizo saludable.
Para no sucumbir a la tentación, aléjate por un tiempo de las peluquerías donde su especialidad son las cabelleras lisas. Busca de cuidar tu cabello por ti misma, o consigue una experta en cabellos rizados que te ayude en el proceso.
Y si eres de las mujeres que mantenían su look liso en casa, comienza por desechar todo elemento químicos para alisar. Reforma tu gabinete de productos, eligiendo los que sean a base de componentes naturales.
2. Córtalo y deja crecer
Este paso, para muchas es el punto más difícil de la transición, pues algunas mujeres se han dedicado a mantener una melena larga. Sin embargo, si existe una decisión fuerte y disposición, debes cortar tu cabello liso para hallar el natural.
El cabello tratado con productos químicos, no conseguirá formar las ondas por si solo y mantenerlas. Por esta razón debes dejarlo crecer y deshacerte del lacio.
En este caso tienes dos opciones, una más arriesgada que otra. La primera es dejar crecer unos centímetros tu raíz natural y cortar tu cabello muy bajo. Aunque será un total cambio de look, saldrás de lo liso rápido y comenzarás a tratar de forma natural tus rizos.
La segunda opción comprende más tiempo, pues de manera simultánea, deberás dejar crecer y cortar. Mientras avanza el crespo, cortarás un poco más de las puntas. Esta acción se debe realizar cada vez que veas que ha crecido, o 1 vez por mes.
3. Estimula su crecimiento
En ocasiones pasa, que por descontrol en las hormonas, poros cerrados o maltrato del cuero cabelludo, el cabello se estanca o crece lento, algo que en nuestra transición no es conveniente.
Por ello, debes comenzar un proceso de estimulación, pues de esta manera su avance se acelerará.
Existen diferentes productos que funcionan para el crecimiento, pero al estar en una transición capilar de liso a rizo, debes optar por lo natural. En este sentido, hay una larga lista de elementos que te funcionarán solos o combinados.
Entre los más buscados están las mascarillas caseras, una explosión de hidratación y vitalidad, que necesita el cuero cabelludo para dejar crecer. Los elementos más efectivos que puedes utilizar para generar estos productos son:
Romero natural o su aceite.
Aceite de oliva.
Cristal del aloe vera.
Huevo entero.
Cebolla.
Cada uno son esenciales, pues garantizarán el crecimiento, puedes aplicártelos solos, o junto con otros elementos naturales en una mascarilla. Estos acompañados de masajes circulares en el cuero cabelludo para estimular.
4. Hidrátalo
Ya sea durante tu transición o con tu nuevo look rizado, tienes que mantener tu cabello hidratado, para ello debes realizar una rutina de cuidado y mantenimiento. En ella, tendrás 4 pilares importantes para alcanzar una melena sana.
Lavado con shampo para cabellos rizados.
Mascarilla hidratadora.
Acondicionador.
Crema para peinar.
Estos tratamientos se aplican con el cabello húmedo, y del único que puedes presidir es de la mascarilla, pero no demasiado, ya que debes aplicarla mínimo 1 vez por semana.
5. Define los rizos
Algo que afecta a muchas mujeres durante el proceso, es que el cabello aún no tiene el largo, ni la forma que ellas desean.
La realidad es que en los primeros meses de su transición, las hebras no son totalmente naturales o aún no están acostumbradas al cambio.
Para ayudar en el proceso, y que no te sientas tentada a retroceder por tu actual imagen, debes definir tus rizos de manera constante. Ya con un cabello completamente natural, con solo definirlos 1 vez por semana bastará, sin embargo, al inicio debes ser más insistente.
Con una crema para peinar especial para tu tipo de hebra, podrás comenzar, aplícala estando húmedo el cabello y no escatimes en la cantidad.
Ya luego, para definirlos tienes diversas opciones, tales como realizar trenzas de dos o tres cabos con mechones de cabello. Sin embargo, también está la opción de usar tubos flexibles para rulos.
Consejos para comenzar tu transición capilar
Algo que al comienzo muchas no toman en cuenta, es que el proceso no es rápido, la idea de una melena con ondas es alcanzable, pero con un arduo trabajo.
No puedes irte sin analizar palabras como constancia, dedicación y seguridad, pues estas son la clave de que, lo que comenzaste lo termines. La razón de esto es que factores como la crítica, la baja autoestima o la ansiedad por no ver los resultados, pueden influir en un retroceso.
Ten paciencia, ya que es un cambio drástico, pero positivo. Ninguna mujer que haya pasado por una transición capilar de liso a rizo, al principio su cabello era lo que esperaba.
Los mejores resultados se hacen esperar, así que mantente firme en tu decisión y no dejes de aplicar cada uno de estos pasos.