El flan de calabaza perfecto para el otoño
El flan de calabaza es un postre que se consume comúnmente en Estados Unidos durante el otoño, cuando la cosecha de calabazas es abundante. Su sabor dulce y cremoso es acompañado del caramelo derretido siendo todo un deleite al paladar.
Se suele elaborar para consumir durante las tardes a manera de merienda, para ofrecer a las visitas, o bien como postre después de la cena. Es por ello que a continuación explicaremos su elaboración paso a paso.
Igualmente, ofrecemos algunas recomendaciones y consejos para que tu flan quede perfecto.
Ingredientes del flan de calabaza
400 gramos de calabaza cortados en cuadros (esto equivale a 3 tazas).
4 huevos grandes y frescos.
200 gramos de azúcar (esto equivale a una taza).
300 ml de leche (esto equivale a una taza y media de leche).
Caramelo líquido para el molde, cantidad necesaria (opcional).
10 ml o una cucharada de esencia de vainilla (opcional).
Recomendaciones y consejos para un flan de calabaza perfecto
Otra opción para preparar las calabazas, en caso de que no cuentes con un horno, es colocar los trozos de calabaza en una cazuela con un poco de agua y esperar hasta que hierva y la calabaza se ablande. Seguidamente, se tritura y se lleva a la licuadora.
Tritura siempre mientras que la calabaza sigue caliente, pues esto hace el proceso más sencillo.
Si usas una flanera o molde de plástico, el cual sea de sencillo desmolde, no es necesario colocar caramelo, y esto es opcional. Pero, si usas una flanera de metal, lo ideal es colocar caramelo para que no se pegue.
Si gustas, puedes elaborar tu caramelo casero colocando azúcar en una sartén, unas gotas de agua y un poco de zumo de limón al gusto, y cuidando de que no se queme. Se calienta a fuego lento y luego lo dejas reposar.
Puedes agregar la mezcla directamente a la flanera sin colar, pero el proceso de colarlo permitirá que la textura del flan quede más lisa y con acabado profesional.
Lo ideal es cocinar el flan a baño de María con una bandeja que te permita colocar de tres a cuatro dedos de agua.
Este tipo de postre es ideal que sea enfriado por al menos 24 horas antes de consumirlo. Posteriormente, debe mantenerse refrigerado para su conservación.
Pasos para la elaboración del flan de calabaza
Nota: Dividiremos la elaboración de la receta en varias fases.
Preparación de la mezcla de calabaza
Corta la calabaza en trozos y colócala sobre una bandeja aplastada, sin que quede un trozo encima de otro. Lleva la bandeja al horno precalentado a 180º C y deja hornear por 30 a 40 minutos.
Haz un puré con las calabazas con la ayuda de un tenedor, y lleva a la licuadora para hacer un licuado con los trozos de calabaza. Lo ideal es hacerlo con la calabaza caliente, pues de esta forma se tritura más rápidamente.
Luego de triturar la calabaza, añade el azúcar y la leche y continúa licuando a velocidad alta para que se integren bien todos los ingredientes.
Seguidamente, agrega los huevos y continúa licuando para que se integren a la mezcla.
Incorpora una cucharada de esencia de vainilla si quieres que el flan quede con un toque más delicioso. Continúa batiendo por un minuto más.
Cocción de la mezcla
Coloca un poco de caramelo líquido en el molde (solo si es de metal) y esparce en toda la base y los bordes.
Cuela la mezcla anteriormente elaborada y deja que caiga en el molde o flanera donde esparciste el caramelo. Usa una cuchara para que el líquido se cuele más rápidamente.
Tapa el molde, ya sea con su tapa o con papel de aluminio y lleva al horno precalentado a 180º C, con una bandeja de agua dentro para cocinar a baño de María.
Espera a que se hornee por 60 a 90 minutos dependiendo de si tu horno tiene poca o mucha potencia. El calor del horno debe ser uniforme arriba y abajo, y preferiblemente sin ventilador.
Para saber si la mezcla está lista, pincha con un palillo y si sale seco tu flan estará cocinado.
Cuando el flan de calabaza esté listo, saca del horno y deja reposar hasta que esté templado.
Al notar que el flan está templado, será el momento de llevar al refrigerador por al menos 4 horas.
Desmoldar y servir el flan de calabaza
Retira la tapa o el papel de aluminio y con la ayuda de un cuchillo, despega los bordes del flan del molde.
Bate un poco el molde para que el flan se despegue en la base. Si notas que el flan se mueve mientras lo bates, estará listo para desmoldarse, pero si se queda fijo, debes volver a pasar el cuchillo por los bordes.
Tapa el molde con un plato y voltea con mucho cuidado para que el flan quede servido en el plato. Presiona bien el plato contra el molde para evitar que el caramelo se desborde al voltearlo.
Corta un trozo del flan y sirve en un plato.
Decoración opcional
Si gustas, bate un poco de crema chantillí y con la ayuda de una manga pastelera y un pico de estrella, realiza espirales decorativos en la base.
Sobre los espirales puedes agregar un poco más de caramelo encima.
También puedes agregar frutos en almíbar, cerezas u frutillas para decorar.
¿Como conservar la tarta de calabaza?
Este es un postre frío y por lo tanto debe conservarse en la heladera o refrigerador. No obstante, es mejor conservarlo en un recipiente plástico o de vidrio tapado dentro del refrigerador.
Este se puede conservar hasta una semana bajo estas condiciones sin dañarse y mantenerse como recién elaborado.
Conclusiones de la receta de flan de calabaza
El flan de calabaza es un postre perfecto para la época otoñal, en donde se puede disfrutar de este con una buena taza de café a media tarde. También es perfecto para sorprender a los niños con un postre delicioso e ideal para que ellos disfruten de los beneficios de la calabaza.
Por ello, te recomendamos intentar esta receta deliciosa y sencilla y sorprender a tu familia.