¿Qué es un perito? ¿Para qué sirve?

En muchas áreas de nuestras vidas necesitaremos un perito, esto es cierto cuanto que las personas al hacerse independientes tendrán que comprar vivienda propia, tener un automóvil y entonces ante cualquier situación, se entenderá que los peritos están en casi cualquier área donde nos desenvolvamos en sociedad.

Incluso en matrimonios, al momento del divorcio muchas veces intervienen peritos para poder llegar a un acuerdo donde todos reciban lo que en justicia corresponde, de la mano de estos expertos.

¿Qué es un perito? ¿Para qué sirve un perito?

Un perito viene a ser un conocer sobre determinado tema. Su conocimiento debe ir de la mano de la práctica o conocimiento de campo y es ahí donde podemos diferenciar a un perito de un científico o profesional con honores en el tema.

Aun cuando se puede dar un caso en que una persona se maneje en ambos ámbitos, lo normal es que un perito en electricidad sea alguien que sepa y de manera frecuente trabaje “directamente” en instalaciones eléctricas de viviendas o maquinarias, cosa que no muy frecuentemente veremos hacer a un científico o ingeniero en el área.

¿Cuál es la diferencia ante la ley?

Pongamos un ejemplo:

Una mujer demanda a su mecánico porque asegura que le ha cambiado el motor de su vehículo al momento de hacerle un trabajo de reparación y le ha colocado uno defectuoso.

Solo otro mecánico con suficiente pericia puede ser tomado como fuente confiable para corroborar o desmentir la acusación. Al revisar el vehículo, solo alguien que constantemente trabaje con vehículos en condiciones similares, sabrá reconocer rastros de algún movimiento que denote el cambio de motor que acusa la mujer.

No importa cuanto conocimiento científico se maneje, los rastros al mover las piezas solo las reconocerá claramente quien diariamente trabaja haciendo movimientos similares. Lo mismo aplica para carpintería, electricidad, plomería.

¿Qué importancia tiene un perito ante una decisión judicial?

Muchas veces de la opinión del perito depende nada menos que la decisión final o conclusión del caso, las personas que son citadas o contratadas como peritos lo saben y al asistir a un tribunal y declarar sobre el área que manejan, saben muy bien que en algunos casos pueden estar condenando a alguien a la cárcel con sus declaraciones, por esta razón, solo pueden ser peritos personas de reconocida solvencia moral. Es otro requisito indispensable por las razones obvias.

Peritos ante casos de divorcios o préstamos bancarios

Son áreas en las que con frecuencia también se utiliza un perito. A la hora de un crédito para viviendas o hipoteca, el banco se asegura de que la persona no quiera hacer pasar una propiedad valorada en 200.000 euros por una que valga 5.000.000 de euros, de no ser por las medidas del ente crediticio, cualquiera podría llevar a cabo tal estafa.

Lo mismo si se trata de propiedades que se colocan como aval para un crédito, si el banco no toma precauciones, cualquiera podría colocar 3 o 4 vehículos chatarra y colocarlos como autos valorados en cientos de miles de euros para un aval crediticio. El banco envía a sus peritos siempre y obviamente sabrá el valor real de los bienes.

En cuanto al divorcio, son casos similares solo que ahora no se trata del dinero que recibiremos del banco, sino de lo que corresponda repartir al momento de la separación legal.

Un perito ante un divorcio debe dar a conocer el valor real de los bienes de ambos y así poder acordar lo que corresponde a cada quien, recordemos que se dan casos en los que cada uno de los cónyuges contrata su propio perito y, en caso de que la diferencia entre las valoraciones de ambos sea muy grande, el tribunal puede decidir la designación de un perito de la institución, cuya valoración será la definitiva para el caso.

Hasta ese extremo llega la importancia de la contratación y disposición de estos expertos.

¿Qué pasa si un perito no tiene cuando menos un título que ratifique su conocimiento?

Tanto para las profesiones como mecánico, carpintero, electricista o plomero, donde conocemos muchos expertos que no tienen título universitario ligado a su profesión pero si tienen títulos técnicos y pertenecen a colegios, como para algunos casos de programadores, periodistas o cualquier otra profesión afín lo que los acredita como peritos no es el título en sí, sino el conocimiento que tienen en la materia que, para bien o para mal, ni está garantizado siempre con el título ni está negado en quien no lo tenga.

A este efecto, se suele tomar como válido el aval que para este perito tenga a bien dar cualquier profesional connotado o el colegio, instituto o agrupación de profesionales del área en la localidad o región.

Ejemplo: El colegio de ingenieros da el aval para un albañil por su conocimiento y años de experiencia para ser citado ante un caso de peritaje por vicios ocultos en la compraventa de una vivienda, en el caso de paredes a punto de caer o ventanas mal colocadas, lo cual altera el costo real de la propiedad.

Las competencias de un perito son extensas y van más allá de dar una opinión sobre determinado tema, el experto puede incluso recolectar pruebas, investigar, para el caso de un vehículo, el perito puede pedir a la corte el permiso para manejar el vehículo y corroborar algún detalle.

Todo lo que en su conocimiento sea valioso para dar con la razón en accidentes, demandas de estafa o cualquier caso afín, podrá ser autorizado con el fin último de alcanzar la aplicación de justicia que las partes buscan.

5 Requisitos para ser un perito judicial en España.

Son cinco los requisitos de obligatorio cumplimiento para que una persona pueda ser perito judicial en España:

1) Carecer de antecedentes penales. Se entiende que si la persona intervendrá en casos judiciales es completamente lógico que no tenga registros por delitos ante la ley.

2) La titulación. Como hemos dicho antes, no será lo mismo ser perito ante un caso que demande la revisión del motor de un vehículo o la construcción de un muro en el patio, que revisar toda la estructura de una casa. Para este efecto, es lógico que se demande un arquitecto.

3) Conocimiento de peritaje. Existen cursos que acreditan a una persona para realizar este tipo de trabajos y saber como manejar las pruebas o elementos que arroje el peritaje.

4) El cuarto requisito es un poco más complicado para algunos casos, se trata de la exigencia mínima de un grado de formación académica, en este caso se trata de un grado superior. Las excepciones a esta regla solo puede ocuparlas un tribunal ante un caso o área determinada.

5) Debe el perito figurar en las listas de algún colegio profesional.

Debemos entender que más que elementos meramente técnicos, los requisitos buscan garantizar el aval profesional de la persona que realizará el peritaje y sobre todo, que sepa manejarse en el área, realizar el informe de la manera debida, por eso el requisito del conocimiento del peritaje es clave, se entiende con ello que se ha hecho el curso respectivo.