¿Cómo alcanzar el verdadero bienestar?
En algún punto todos nos hemos hecho esta pregunta, y es que el bienestar está más allá de la falta de malestar. Todos deseamos sentirnos plenos con todos los aspectos de nuestra vida y con nosotros mismo.
Y es precisamente este deseo el que nos impulsa a ser mejores y estar mejor día a día con nosotros y con quiénes nos rodean.
Valoramos el bienestar inmensamente, y efectivamente es una aspiración central del ser humano, pero no es un proceso que simplemente viene dado.
Estar bien es consecuencia de nuestras acciones, por lo que te enseñaremos más sobre qué es estar bien y como lograrlo.
Es aquella sensación de plenitud que sentimos cuando estamos complacidos por los aspectos que rodean nuestra vida. Es también el impulso de seguir viviendo y hacer actividades que nos proporcionen esa sensación de felicidad, comodidad y plenitud que tanto deseamos.
El bienestar incluye varios elementos dentro de sí mismo como lo son el emocional que hace referencia a como nos sentimos y gestionamos esas emociones.
El físico que se refiere a la forma en la que cuidamos de nuestro cuerpo y no solo carecemos de enfermedad sino que tenemos salud.
Y el social que compone todos los demás ámbitos de la vida del ser humano como el trabajo, las relaciones interpersonales, el hogar, la capacidad económica, etc. Conozcamos un poco más a profundidad las implicaciones del bienestar emocional o psicológico y físico continuación.
¿Qué es el bienestar psicológico?
Según la psicóloga Carol Ryff el bienestar es un concepto amplio que incluye varios elementos que llevan a las personas a sentirse bien.
El primer elemento es la autoaceptación, este hace referencia a aquellos sentimientos que tenemos con relación a nosotros mismo y nuestras características tanto positivas como negativas.
Aquellas personas que aceptan su pasado y su presente tiene más autoaceptación y por tanto más actitudes positivas hacia si mismas que aquellas que evitan o niegan sus pasado y características negativas.
El segundo elemento está comprendido por las relaciones positivas que se refieren a tener relaciones de calidad con personas importantes con las que se pueda contar y se desarrolle una relación de amor y apoyo.
Estas personas pueden confiar y tener relaciones calidad y satisfactorias al contrario de aquellas que personas que no confían y no cuentan con el apoyo de otras. Encontramos que el tercer elemento es el propósito de vida o aquel sentido que una persona otorga a su propia existencia.
Los seres humanos necesitan sentir que tiene un propósito para sentirse bien y con base en el se trazan metas y se sienten bien con sus logros. Las personas que no establecen metas sienten que si vida no tiene sentido y que no hay ningún propósito que los impulse.
El crecimiento personal es el cuarto elemento descrito, las personas que trabajan en su aprendizaje y si calidad personal tienes mayor bienestar que aquellas que ignoran sus atributos negativos y no se esfuerzan por ser mejores personas.
Aquellos que sacan ventaja de sus habilidades y talentos desarrollan su potencial y crecen como personas.
La autonomía es el quinto elemento y se refiere al poder que tiene las personas sobre si mismas y sus actos que les dan sensación de control y les permite cambiar el curso de su acción si así lo desean.
Las personas que se sienten autónomas toman sus decisiones por si mismas y sienten bienestar como consecuencia a diferencia de aquellas personas que dejan que otros decidan sobre el curso de su acción trayendo esto consigo la sensación de insatisfacción.
Y por último el dominio del entorno propone que aquellas personas que son capaces de manejar su ambiente para sacar provecho de este y lograr sus metas se sienten más satisfechas que aquellas que sienten no tener el control del mismo.
¿Qué es el bienestar físico?
Llamamos bienes físico a aquella sensación de plenitud obtenida de unos buenos hábitos tanto físicos como alimenticios. Cuando nuestro cuerpo está en perfectas condiciones y todos los órganos están sanos nuestras cualidades físicas funcionan a plenitud.
Si deseamos gozar de una buena salud física es importante dejar el sedentarismo, ya que este puede afectar negativamente nuestro bienestar físico y mental.
Y asistir a un centro deportivo de forma habitual o hacer deporte en casa o algún parque, incluso salir a caminar media hora cada día y cuidar la alimentación te ayudara a alcanzar el bienestar físico.
Establece rutinas para mantener un estilo de vida saludable físico y psicológicamente que se conviertan en tus hábitos de vida y te hagan sentir plenitud y bienestar.