¿Cómo integrar el mindfulness a tu vida?
El mundo moderno nos ha dejado la concepción de que debemos ser hiperproductivos para considerarnos capaces y estar en sintonía con las exigencias ambientales.
Sin embargo el descanso es también parte esencial de una buena salud e incluso de una buena productividad.
Es complejo desarraigar la creencia de que si estamos descansando somos vagos o estamos perdiendo tiempo y esto nos hace sentir culpables.
El descanso es una actividad que nos ayuda en múltiples sentido a nuestro bienestar, por lo que debemos entrenaros para tomar descansos libres de culpa que revitalicen nuestro cuerpo.
Hábitos saludables de autocuidado
El autocuidado es aquellas actividades que hacemos por y para nosotros mismo, en ocasiones las creencias populares nos han hecho creen que invertir mucho tiempo en nosotros es egoísta.
Sin embargo nada más alejado de la verdad, como seres humanos necesitamos sentir bienestar para que eso se traduzca en salud dentro de nuestra vida.
Seguir una rutina saludable de cuidados propios solo beneficia nuestro cuerpo, por eso es importante considerar aquellas actividades con las que nos sentimos plenos y dedicar algunos minutos al día o a la semana para su realización.
Hay una diferencia en los hábitos saludables de descanso y lo que popularmente es conocido como “ser vago” cuando estás invirtiendo tiempo en tu salud no estás siendo vago, al contrario estás alimentando tu espíritu.
Siéntete en la libertad de realizar actividades solo para ti, reafirma tus creencias y concreta contigo y con tus metas en estos momentos de descanso activo.
El mindfulness es una gran herramienta que consiste en mantenerse en el momento presente sin importar que actividad estés realizando, realizar estas actividades reduce considerablemente los niveles de estrés y te hará sentir en paz contigo y tu entorno.
¿Cómo decir que ¡NO! sin sentirnos egoístas?
El sentimiento de culpa tiene origen en la primera infancia, en esta etapa nuestros padres reprendían nuestro comportamiento, lo que generaba este sentimiento de culpa utilizado para modificar estas conductas.
Esto establece un anhelo alrededor de la aprobación externa, que es agradable, por eso cuando ponemos por encima nuestros deseos a las expectativas de los demos nos sentimos egoístas.
Al crecer esta aprobación externa deseada por los padres se vuelve también deseada por parte de los amigos o del ambiente que nos rodeamos, hacemos los posibles por ser buenos y no tener estos sentimientos de culpa y egoísmo.
Sin embargo este comportamiento está sustentado en la complacencia de las expectativas ajenas, lo que se pone en juego al momento en el que estas expectativas contradicen nuestros deseos.
Por lo que para deshacernos de esos sentimientos de culpa y egoísmo que surgen de no complacer a los demás debemos tener presentes como aspiramos vivir.
Si deseamos que nuestras creencias internas sean las que guíen nuestros comportamientos tenemos que anteponerlas a las expectativas de los que nos rodean.
Decir no es saludable, y aunque no está complaciendo al otro, la recompensa de anteponer nuestra salud es sustancialmente mayor a las creencias que viene del exterior.
Libera a tu mente de la pesadez que supone complacerlos a todos, conecta contigo, complácete, cuídate y prioriza tu salud.
Actividades que puedes hacer como parte de tu rutina diaria
Como mencionamos anteriormente el mindfulness es una práctica llena de beneficios que te servirá para establecer rutinas sanas de descanso y autocuidado en tu vida, aquí te presentamos unas alternativas:
1. Dar un paseo
En muchas ocasiones damos por centrado el ambiente que nos rodea, y nos perdemos de las cualidades y bellezas alrededor, esta práctica invita a observar con atención el ambiente que te rodea, sentirte inmerso en él, puedes tomar un paseo por tu cuadra y descubrir las fantásticas características que esconde.
2. Revisar tu cuerpo
Esta actividad propone hacer un escaneo corporal, darnos cuenta de cómo esta nuestro cuerpo, si nos duele algo, o si necesitamos comer o acomodar nuestra postura.
3. Dar un paso atrás
Estamos constantemente rodeados de nuestros pensamientos, pero en esta actividad te invitamos a realmente verlos, como si fueses un espectador, este ejercicio te ayudara a identificar que algunos de esos pensamientos negativos no se corresponden realmente con cómo eres.
4. Estar presente
Esta propuesta supone detener nuestra actividad un momento para encontrarnos verdaderamente en el presente y hacer tres respiraciones.
5. Respirar
Toma un momento para respirar de forma consiente, esto calmará tu mente.
6. Aceptar tus pensamientos emociones
Te invitamos a aceptar esos pensamientos y emociones que llegan a tu mente de repente, son parte de ti, dales la bienvenida, date la oportunidad de sentirlos y elabóralos.
Trabajar en nuestro bienestar desligado de las expectativas ajenas es una oportunidad para vivir la vida de forma más plena, implementa estas actividades de autocuidado y date la oportunidad fortalecer tu salud y tu espíritu.