Termófilos
El estudio de los organismos vivos es algo imprescindible para conocer nuestro entorno y cómo se comporta el mismo. De esta manera, surge el término de termófilo, el cual se da a distintos tipos de organismos que cumplen ciertas características ambientales.
Los organismos termófilos corresponden a uno de los distintos tipos de organismos que se agrupan según su capacidad de resistencia a altas o bajas temperaturas. Por ello, es imprescindible saber más al respecto para conocer mejor nuestro entorno.
Aquí te vamos a proporcionar todo tipo de información sobre estos famosos organismos, y vas a conocer aspectos como sus importancias y características. Por ello, no dudes en consultar esta información.
¿Qué son los organismos termófilos?
El término termófilo hace referencia a todo organismo que es capaz de vivir en condiciones de temperatura extremadamente altas, llegando a superar los 45°C.
Este tipo de organismos corresponden al grupo de extremófilos, los cuales se caracterizan por vivir en condiciones ambientales extremas, las cuales no son soportadas por la mayoría de formas de vida en la tierra.
Una característica de los organismos termófilos es que crecen de forma muy rápida, aunque son de corta duración. Por ello, destaca su desarrollo bastante único.
Tipos de organimos termófilos
Hay diversidad de organismos termófilos, los cuales se van a dividir en dos grandes grupos dependiendo de las condiciones de temperatura que soporte. Los mismos son los siguientes:
Organismos termófilos simples: se caracterizan por soportar temperaturas de 25°C y un máximo de 75°C. Por ello, a pesar de caracterizarse por poder vivir en condiciones de temperaturas altas, poseen ciertas limitaciones.
Organismos hipertermófilos: Permiten soportar temperaturas superiores a los 75°C. Pueden llegar a soportar los 100°C mientras haya agua líquida de por medio. Por todo esto, los organismos hipertermófilos suelen vivir en las profundidades del mar.
Las bacterias termófilas
El tema de las bacterias termófilas en el tema de salud es bastante delicado, y mucho más si se trata de sanidad y de brindar productos alimenticios sanos para las personas.
Como se sabrá, las bacterias termófilas son aquellas que pueden soportar altas temperaturas, llegando incluso a los 100°C. La mayoría de procesos de eliminación de bacterias de los alimentos se suelen dar a través de coacción. Por ello, las bacterias termófilas suelen resistir todo este proceso generando gran riesgo en el tema de salud.
Las industrias sanitarias suelen emplear procesos especiales para deshacerse de estas bacterias. De esta manera, se suelen emplear temperatura de gran magnitud para poder deshacerse de las bacterias termófilas. Normalmente, se suelen emplear temperaturas que superan los 125°C, las cuales no son soportadas por estos organismos.
¿Por qué las bacterias termófilas sobreviven a altas temperaturas?
Las bacterias termófilas están conformadas por cadena de lípidos que le permiten generar enzimas hasta a gran cantidad de temperaturas, lo cual les permite su supervivencia a este tipo de ambientes.
Otro aspecto a señalar es que este tipo de bacterias solamente son resistentes al calor en determinadas etapas de su vida, siendo principalmente cuando se encuentran en fase de espora o son simples huevecillos.
Los organismos termófilos también cumplen un proceso similar al de las bacterias termófilas, por lo cual los mismos permiten generar diversos elementos, indispensables para su supervivencia, en altas temperaturas.
Usos beneficiosos de las bacterias termófilas
Las bacterias termófilas no corresponden únicamente un riesgo para nuestra salud, ya que se pueden emplear de forma beneficiosa en la creación de distintos productos alimenticios.
El principal ejemplo es el de la elaboración de productos fermentados. Normalmente, estos productos suelen ser elaborados con el apoyo de distintas bacterias termófilas que les permiten dar propiedades de larga duración. La cerveza es quizá el producto más famoso de este tipo.
