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Auriculares Skullcandy Push Active lo mejor en audífonos deportivos
Los nuevos Skullcandy Pushc Active son unos de los más rápidos en hacer una gran aparición con Skull iQ, que nos permite el control por voz y características extra.
Hoy en día, no basta con despachar unos auriculares remotos que suenen muy bien y tengan un buen aspecto. ¿Ha visto a qué se parece el mercado? Solo en este 2021 hemos visto una inmensa cantidad de nuevos de auriculares que satisfacen con creces esas necesidades.
Para una marca como Skullcandy, que durante años se ha centrado en transmitir un estilo alternativo, eso es una prueba. Con el Push Push Active, hemos percibido cómo ha reaccionado: con mucha innovación.
Skull iQ es la aplicación más peculiar de todas
La aplicación Skull iQ se compone de cálculos astutos y capacidades que mejoran los resultados potenciales de los auriculares. El PushPush Active son los primeros, junto con los Grind Fuel, en utilizar esta innovación de forma interesante, y lo hacen con unas cuantas ventajas sobre otros aparatos.
Lo más llamativo es que estos auriculares cuentan con su propio asistente de voz, por lo que podemos dar órdenes en voz alta y podrán percibirlas y ejecutarlas. De esta manera, no dependen de Google Assistant o Alexa como numerosos auriculares diferentes, a pesar de que igualmente podemos utilizarlos con los auriculares.
Los Skull iQ se centran más en los controles identificados con la reproducción de música, y destacan especialmente por su coordinación con Spotify; en caso de que esa sea tu ayuda número uno, la fortuna te ha sonreído, ya que este compañero nos permite realizar un amplio abanico de actividades, empezando por abrir la aplicación con solo decir "Hola Skullcandy, Spotify".
A partir de ahí, podemos manejar la reproducción de música con solo decir "Hola Skullcandy, por ejemplo, "Reproducir", "Siguiente" o "Subir volumen". Lamentablemente, ahora mismo solo percibe las órdenes en inglés, lo que puede ser algo irritante en caso de que no pueda percibir tu lenguaje. Igualmente podemos iniciar el asistente introducido de forma natural en el versátil diciendo "Hello Skullcandy, Assistant".
El reconocimiento de voz funciona con eficacia y es generalmente rápido, aunque en varias ocasiones no percibe bien, ante el revuelo del clima.
En cualquier caso, es una ayuda extraordinaria, sobre todo en el caso de que tengamos las manos ocupadas y no podamos hacer que el portátil cambie de melodía, por ejemplo. Además, en el caso de que prefiramos no utilizar la voz, tenemos un botón real en cada auricular, algo que me alegra excepcionalmente; es un botón pesado que no pulsaremos ni contactaremos accidentalmente.
En cualquier caso, no es en absoluto el único componente curioso de estos auriculares. Esto se debe a que nos permite utilizarlos para hacer funcionar la cámara.
Simplemente tenemos que iniciar la aplicación de la cámara, y cuando presionamos el botón comenzará el inicio para tomar la foto; es ese tipo de buena idea que nunca me había pasado, sin embargo, que es una buena opción para todos y es excepcionalmente útil.
Otra inclusión inteligente que puede marcar la diferencia es la similitud con Tile, la etapa de rastreo Bluetooth que nos permite descubrir nuestra cartera o llaves. Debido a esto, podemos rastrear nuestros auriculares perdidos utilizando la aplicación y la organización de Tile.
Nos encontramos con un modo envolvente, o como lo llaman en Skullcandy, un "modo cognitivo", que intensifica el sonido de nuestra circunstancia actual, aunque en mis pruebas fue apenas perceptible, quizá por el hecho de que el confinamiento no es excelente. Más intrigante es el modo para transmitir el sonido a otro cliente de los auriculares Skull-iQ.
Esto es lo que parecen los auriculares Push Active
Hablando de los auriculares reales, los Skullcandy Push Active son auriculares de práctica, efectivamente llamativos por la curva que emerge de cada auricular y ofrece una sujeción superior en la oreja.
En lugar de engancharse por detrás, se enganchan por delante, lo que requiere acostumbrarse y será un poco problemático en caso de que lleves gafas. Sin embargo, una vez colocados, no se mueven por mucho que nos movamos.
En la caja real descubrimos dos juegos adicionales de pila de varios tamaños, sin embargo, Skullcandy no ofrece varios snares. En el caso, de que tengas unas orejas enormes, el enganche está al límite y a veces noto que me saca los auriculares de la oreja. Se habrían valorado unos bordones más grandes, o mucho más modestos.
Ese agarre adicional hace que el estuche de carga sea enorme, tal vez excesivamente grande, sin embargo, esencialmente lo compensa dando hasta 34 horas de duración extra de la batería para los auriculares; eso es un punto más sólido, ya que los auriculares son aptos de aguantar hasta 10 horas.
Adicionalmente me ha gustado el detalle de la tapa para el puerto USB-C, que evita que se moje o ensucie cuando lo llevamos a nuestras empresas, al igual que la carga rápida que consigue dos horas de utilización con diez minutos de carga.
De buen gusto, no son unos auriculares excepcionalmente ostentosos, seleccionando el color oscuro con pequeñas sutilezas en naranja. No podía faltar la conocida calavera, el logotipo de Skullcandy, pero en general son más prácticos que bonitos.
El sonido es una perspectiva más significativa para cualquier individuo que compra un Skullcandy, y el PushPush Active transmiten; como esperaba, su punto sólido está en los bajos, y la música electrónica suena increíble, probablemente impresionante en esa clase a este costo.
Completo y sorprendente
Que las apariencias no te engañen: estos Skullcandy Push Active sorprenderán a cualquier persona que se atreva a despreciarlos por su imagen. La medida de la innovación y los componentes adicionales supera a la de la mayoría de los oponentes, y algunos son excepcionalmente valiosos e intrigantes. Es un valor adicional que otros auriculares no tienen.
También me sorprendió que este Push Active cuesten solo 79,99 euros, pensando en toda esa innovación incorporada; a pesar de que, como dije anteriormente, independientemente de que cuesten 100 euros/$, los sugeriría en todo caso en caso de que incluyeran la abrogación de la conmoción dinámica.
Tal y como estarán, son todavía recomendables en el caso de que hagamos ejercicio y nos apetezcan esas capacidades extra, pero los fabricantes deben saber que cada vez es más barato conseguir la retracción de movimientos; hace poco hablamos de los Nothing ear (1) por 100 euros/$, por ejemplo.
