Damasco en Siria
Encontrar una ciudad conservada, religiosa y cultural que sea mencionada en los primeros textos conocidos por el hombre, es una experiencia satisfactoria por cumplir y es Damasco la capital de Siria nuestra opción de viaje, sobre todo cuando eres un apasionado a la arqueología y teología.
Si bien es cierto que es una ciudad en constante guerra, aun ofrece muchos sitios turísticos para conocer. Sin embargo, viajar a Damasco es recomendado para ese tipo de turista extremo, dispuesto a aventuras extremas. No significa que debes saber correr en caso de un bombardeo, no, al contrario, dispuesto a moverte rápidamente, identificar peligros y otras situaciones.
Con un clima semiárido, Damasco posee grandes hallazgos arqueológicos religiosos, se cree que la dinastía Abasí conservo toda la cultura islámica enterrándola en cuevas para que sus creyentes pensaran que habían borrado su pasado, pero luego con la dinastía Mameluco y Ayyubí fueron rescatando su historia aunque mucho de los objetos encontrados que no eran de su línea religiosa eran arrojados al rio Barada que para entonces era más grande y con mayor fuerza.
Cuando recorres Damasco encuentras muchas tradiciones y es normal que sus mejores atractivos turísticos sean templos, casas y tumbas de personajes del pasado, tanto es que hoy en día varias religiones luchan por su derecho a ciertas tierras y objetos que para ellos son de su propiedad.
Damasco está en constante cambio, cada día nuevas empresas invierten en la región creando nuevos hoteles y sitios recreativos, en el futuro se estima que nuevos museos reúnan toda su cultura y el gobierno permita dividir las religiones entregando cierta arqueología a sus legítimos y tradicionales propietarios.