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Han ordenado mantener en secreto los documentos que incriminan a Alex Saab
Alex Saab es culpado de lavar una enorme cantidad de dólares conseguidos a través de negocios ilícitos con el gobierno venezolano, con los que tuvo la opción de burlar las sanciones económicas dictadas por los Estados Unidos.
El juez Robert Scola decidió esto tres días, después de que la fiscalía presentara una moción solicitando una orden, que regule la divulgación de pruebas e información sensible de Saab.
Esto se exige, argumentando que hay documentación y reportes de personas que actualmente están siendo investigadas, otros acusados, cooperadores, números de identificación, direcciones postales y de correo electrónico, balances financieros y fechas de nacimiento.
Kurt Lunkenheimer y Alexander Kramer, quienes son los fiscales del caso, hicieron saber al juez que habían asesorado a los abogados de Saab y que estaban de acuerdo.
"La moción del gobierno es concedida", dijo el juez Scola en su solicitud de tres páginas, en la que aclaró que ni la defensa de Saab, ni los fiscales deben ofrecer la prueba mencionada por el tribunal a ningún individuo, excepto si el tribunal lo ordena.
En Estados Unidos, tanto las audiencias como el material de un juicio son de acceso público, excepto si un juez dicta lo contrario según sea el caso. Saab se presentó en Estados Unidos en octubre de 2021 y permanece en una cárcel del gobierno en el centro de Miami.
Los examinadores afirman que Saab, de 49 años, adquirió un número mayor a 350 millones de dólares a través de tratos corruptos en los que supuestamente pagó a las autoridades del gobierno de Maduro y falsifico los documentos, para obtener acuerdos multimillonarios para construir viviendas en Venezuela.
En julio de 2019, un perspicaz jurado presentó ocho acusaciones contra Alex Saab; una por supuesta asociación para lavar dinero en efectivo y siete por evasión ilegal de impuestos.
Sin embargo, el gobierno de Estados Unidos luego retiró los siete cargos de evasión ilegal de impuestos, siendo esto parte del acuerdo para sacarlo de Cabo Verde, donde fue capturado en junio de 2020.