Kaduna en África tenia esclavos en pleno siglo XXI
En la ciudad de Kaduna en África, específicamente al norte de Nigeria se ha evidenciado como los vejámenes, ultrajes y la esclavitud hacían de las suyas en lo que se conocía como una escuela para estudiar el Corán.
Es increíble como después de tantos años de la historia del hombre y luego de haber vivido tantas situaciones complicadas en la historia, aun hoy se observen sitios clandestinos como este, donde más de personas; entre hombres y menores de edad vivían momentos de terror y sufrimiento.
Escuela religiosa en el siglo XXI
Haciéndose pasar como escuela religiosa para la enseñanza del Corán, atraían a muchas personas que querían aprender más de su religión o solo porque sus padres querían que sus hijos conocieran más su religión.
Pero para sorpresa de todos realmente era un recinto donde las torturas, los maltratos, humillaciones y relaciones homosexuales sucedían día tras día. Dejando claro que puertas adentro estaba presenta la esclavitud del siglo XXI.
¿Qué encontró la policía?
Hombres y niños de todas las edades; encadenados, golpeados o con enormes marcas que dejaban ver los signos de las torturas a las que fueron expuestos.
Esto fue lo que encontró la justicia de ese país; un sitio que funcionaba como depósito para la esclavitud en el siglo XXI.
Gracias a una denuncia anónima la policía logró salvar lo que quedaba de todas estas personas.
Hasta el momento van aproximadamente 8 detenidos; entre nigerianos y extranjeros.
Testimonios: Quienes eran retenidos contra su voluntad han manifestado que durante su estadía en ese espantoso lugar fueron golpeados, torturados de muchas formas y abusados sexualmente.
¿Nunca intentaron escapar? Si, y quienes se atrevieron tuvieron que pagar con duras consecuencias, por desafiar su régimen de esclavitud en el siglo XXI.
Entre otras cosas, manifiestan haber sido amarrados colgando desde el techo, días sin recibir alimento, encadenados a pesadas cadenas gruesas de metal; que en muchas ocasiones no les permitía ni moverse, o simplemente recibían brutales golpizas.
