Manny Pacquiao se convirtió en Supercampeón AMB por decisión dividida
El filipino Manny Pacquiao venció este sábado por decisión dividida al estadounidense Keith Thurman en doce asaltos para coronarse campeón wélter de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB), en Las Vegas.
La lucha por el cinturón AMB marcó un hito trascendental para ambos boxeadores. Tanto Pacquiao como Thurman han cumplido una hazaña memorable. El filipino ingresó al exclusivo club de los campeones que han conseguido títulos con más de 40 años y para el estadounidense un enfrentamiento ante una leyenda como “PacMan” le ha dado brillo de prestigio a una carrera de altos y bajos.
Pacquiao es ahora el nuevo supercampeón de la división tras quitarle también el invicto a Thurman.
En el MGM Grand Garden Arena de Las Vegas, el filipino hizo una gran demostración de que a sus 40 años sigue siendo uno de los grandes boxeadores de todos los tiempos.
Dos jueces dieron como ganador al filipino por 115-112 y 115-112, mientras que el tercero le dio la pelea al estadounidense por 114-113.
"El boxeo es mi pasión", dijo Pacquiao después de la pelea, cuando le preguntaron sobre la continuidad de su carrera deportiva.
Ya desde el primer round quedó claro que se vería un combate con mucha acción. En esa vuelta ambos boxeadores intercambiaron golpes. Pero el que pegó mejor fue Pacquiao, que mandó a la lona a su rival con un gancho de derecha. El estadounidense, de 30 años y que aún estaba invicto, resistió los pocos segundos que quedaban antes de que sonara la campana.
Con agilidad y potencia, el filipino dominó con claridad hasta el séptimo round. Después, Thurman salió de la defensiva y llegó a poner en aprietos a la superestrella asiática.
En el décimo asalto, Pacquiao logró conectar un contundente golpe en la zona. Thurman se las arregló para evitar el desenlace temprano y, en los últimos segundos, atacó al filipino, ahogado por la búsqueda del nocaut.
"Mi rival es un buen luchador y boxeador. Era fuerte, creo que hizo todo lo que pudo, y yo hice todo lo que pude. Esta noche hicimos felices al público, porque fue una buena pelea", declaró Pacquiao .
Hubo un espectador especial: Floyd Mayweather, que siguió el combate desde la primera fila, que derrotó a Pacquiao en el 2015 y al que todos quieren ver nuevamente frente a frente con el filipino.