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Más de 200 juezas afganas temen por sus vidas tras liberación de criminales

Hoy los delincuentes están libres y las juezas huyen

Darwin Nexans
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Con su ascenso al poder, el gobierno del Talibán ordenó la liberación de miles de hombres encarcelados, sentenciados por mujeres encargadas de impartir justicia.

Más de 200 juezas afganas temen por sus vidas tras liberación de criminales

Más de 220 juezas afganas se han visto obligadas a huir de sus casas y vivir a escondidas, en la clandestinidad, desde que el Talibán usurpó el poder.

A medida que el grupo ocupaba ciudades, abría los calabozos y liberaba a todos los encarcelados, entre ellos los mismos hombres que las juezas habían sentenciado.

Ante estas acciones, cientos de mujeres que estaban en la magistratura se vieron forzadas a huir de casa, ya que muchas de ellas recibieron amenazas de muerte, además de que tienen temor de las represalias que puedan tomar los talibanes.

De esas 220 féminas, unas 26 lograron escapar a Grecia. Sin embargo, la huida no fue para nada sencilla, así comentó una de ellas, entrevistada por la BBC, quien pidió no ser identificada.

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La jueza contó que tuvo que irse de su casa a media noche, ya que eso había acordado con la persona que la ayudaría a escapar junto a sus dos hijos. Narró que sus ayudantes le advirtieron de los peligros que se podrían encontrar en el camino, ya que los talibanes tienen alcabalas en casi todas partes. Aun así, aceptó el riesgo.

Esta jueza trabajó en un tribunal, donde dictó sentencia a una gran cantidad de delincuentes, por delitos como violación, asesinato, robo, abusos contra la mujer.

Ella asevera que los castigos que impuso fueron largos y graves. "Pero después de que todos fueron liberados, cada uno de ellos nos dijo: "Las mataremos si las encontramos", dijo la mujer.

Después de pasar por diferentes puntos de control de los talibanes, refugios y hasta el mismo desierto, la jueza logró llegar a un aeropuerto, desde donde junto a otras 25 mujeres magistradas, fueron trasladadas a Grecia, desde donde las ayudaron y le pidieron solicitar asilo en un tercer país para una mayor seguridad.

Igualdad derribada

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Entre los grandes logros alcanzados durante los 20 años de ocupación estadounidense y la OTAN, se encuentra la igualdad a nivel constitucional. Por ejemplo, el artículo 22 de la Constitución afgana, señala que “Todos los ciudadanos de Afganistán, hombres y mujeres, tienen los mismos derechos”. El artículo 43, refiere que “La educación es un derecho de todos los ciudadanos de Afganistán”, mientras que el 48, dice que “El trabajo es un derecho de todos los afganos”.

Por otro lado, el parlamento afgano redactó la Ley de Eliminación de la Violencia contra la Mujer, que fue promulgada en 2009, y de acuerdo con el instrumento, al menos unos 22 actos de abuso contra las mujeres, como la agresión, el matrimonio forzado, la violación, la prohibición de que una niña fuera a la escuela o que las mujeres compren propiedades, fueron transformados en delitos penales.

A pesar de que estas leyes no han sido derogadas por el gobierno del Talibán, este ha decretado que las mujeres tanto trabajadoras como estudiantes se queden en casa, sin la posibilidad de ir a la escuela o el trabajo. Según el régimen, esta prohibición será hasta que todos los trabajos y centros de estudio puedan considerarse seguros.

A pesar de ello, esto no da esperanza a las mujeres afganas, ya que el secretario del portavoz de los talibanes, Bilal Karimi, cuando fue cuestionado sobre si las mujeres podrían ocupar cargos importantes como el de juez o ministro, este dijo que por ahora "las condiciones y oportunidades laborales para las mujeres todavía se están discutiendo".

Sin embargo, la realidad que se vive en el país es otra: una fuerte persecución a las mujeres que tenían cargos prominentes en el gobierno anterior, como dijo la juez que ahora se encuentra en Grecia, junto a 25 de sus colegas.

Pero, aparte de las juezas, otras defensoras de los derechos humanos también han reportado persecución, y temen por sus vidas. Así lo revela una investigación realizada por la agencia de noticias Reuters.

De acuerdo con el reporte, al menos unas 1000 mujeres, que trabajan por garantizar los derechos humanos podrían estar en la mira de los talibanes,

Se cumplen las advertencias

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Grupos femeninos, defensores de los derechos de la mujer en Afganistán, advirtieron que con la avanzada de los talibanes para tomar el poder, llegarían días oscuros a la nación, en los que los principales blancos de ataque serían las niñas y las mujeres.

Desde principios de 2021 se evidenció un ascenso en el número de civiles asesinados, llegando a casi el 50 %, y de acuerdo a las cifras de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) se reportaba un aumento de mujeres y niños muertos y heridos.

En enero de este año dos magistradas fueron asesinadas en un coche. Para ese momento, el gobierno afgano responsabilizó de los crímenes a los talibanes, sin embargo, ellos negaron su culpabilidad.

Cuando las mujeres comenzaron a ver los avances de los talibanes advirtieron al gobierno y a organizaciones defensoras de derechos humanos, que esto haría retroceder la libertad en todos los niveles.

Para ese entonces, el gobierno, Estados Unidos y el Talibán sostenían una mesa de diálogo para “poner fin al conflicto” político que vivía la nación.

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Y las aspiraciones de esta fémina no son una utopía, ya que a pocos días de la llegada de los talibanes al poder, ciudadanos afganos, entre ellos una gran cantidad de mujeres encabezaron manifestaciones en contra del régimen autoritario del Talibán, ondeando la bandera nacional, la cual ha sido prohibida.

Aunque las manifestaciones han disminuido, debido a las criminales acciones de los talibanes, como la decapitación de mujeres en sitios públicos, el sueño de la libertad no muere en los ciudadanos que una vez respiraron los aires de la democracia.

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