La mejor receta de gallina en pepitoria
La gallina en pepitoria es una receta clásica en la gastronomía de España, siendo principalmente autóctono de la cocina gallega. De hecho, es común visitar España y conseguir esta receta en los menús de los restaurantes de la localidad.
A pesar de ello, es una receta muy sencilla de preparar y que proporciona una gran cantidad de nutrientes. Además, la gallina proporciona un mejor sabor que el pollo. Por ello, resulta un plato no solo delicioso, sino también rico en nutrientes.
Su único inconveniente es que su carne es bastante dura, por lo que requerirá una gran cantidad de tiempo para su cocción. No obstante, una vez que la carne se haya ablandado, esta desprenderá un gran sabor para el guiso.
Esta receta la puede acompañar con lo que desee como contorno. No obstante, una buena opción puede ser el arroz blanco, patatas fritas o pan. Esto se debe a que con estos contornos podrá remojarlos en la salsa del guiso.
A continuación explicaremos la manera más sencilla de preparar esta receta, aunado a algunos consejos y recomendaciones adicionales.
Ingredientes de la receta de gallina en pepitoria
1 gallina troceada.
1 cebolla mediana picada.
2 dientes de ajo pelados.
50 gramos de jamón serrano picado.
30 gramos de almendras crudas.
2 yemas de huevos cocidos.
10 cucharadas de aceite de oliva.
250 mililitros de caldo de pollo.
1 copa de vino blanco seco (o jerez).
Perejil picado al gusto.
Harina de trigo (la cantidad que considere necesaria).
Algunas hebras de azafrán (La cantidad que considere necesaria).
Algunas hojas de laurel.
Sal al gusto.
Detalles técnicos de la receta de gallina en pepitoria
La disposición de los ingredientes es para 4 personas. En caso de que desee preparar esta receta para más personas, solo multiplique la cantidad de ingredientes a usar.
La cantidad de calorías de esta receta es de 640.
El tiempo de preparación de esta receta es de aproximadamente 3 horas. Esto se debe a que es necesario dejar ablandando al fuego la carne de la gallina por al menos 2 horas o hasta que esta se ablande.
Es una receta muy sencilla de realizar, y no es necesario ser un experto para su ejecución.
Recomendaciones antes de iniciar la receta
Deje la carne de gallina en una cacerola con agua para que se ablande a fuego medio durante unas dos o tres horas, o hasta que la carne se ablande. Esto es debido a que al ser una carne fibrosa, necesitará mucha cocción.
Intente escoger los ingredientes más frescos para la preparación de esta receta.
Si le es posible, escoja una gallina que no sea tan vieja y de su cría personal. En caso de comprarla, trate de que sea una gallina fresca y no congelada.
En caso de no tener vino blanco para la receta, también puede usar jerez o whisky. Incluso, puede usar un poco de ron blanco para el guiso.
Pasos para la preparación de la gallina en pepitoria
Nota: Debido a la extensión de esta receta, dividiremos el procedimiento en dos partes para facilitar la explicación.
Preparación de la gallina
Una vez que note que la carne de la gallina está blanda, corte las piezas y aproveche las piezas que sean aptas para el guiso, es decir con abundante carne.
Lave muy bien las piezas a utilizar en el guiso, retire la piel y el exceso de grasas.
En un sartén, añada el aceite y colóquelo a fuego medio. Enharine los trozos de la gallina y fríala en el aceite. Cuide de que no se quemen, sino de que queden muy bien dorados, dándoles vueltas constantemente.
Pase los trozos de gallina fritos a una cacerola y deje en la sartén cuatro cucharadas de aceite.
Troce las cebollas y los ajos y añádalos a la sartén hasta que estén transparentes, es decir que debe cocinarlos bien. Cuide de rascar la sartén con una cuchara de madera para que el ajo y las cebollas no se peguen.
Rehogue la cebolla con el jamón y viértalos sobre la gallina. Añada el vino y el caldo (exceptuando solo dos cucharadas y reservándolas).
Sazone y coloque todo a fuego lento durante 45 minutos, Deje que se cocinen durante este tiempo bien tapado y removiendo cada 10 a 15 minutos.
Preparación del majado para acompañar
Para preparar el majado, agregue ajos, perejil, azafrán y almendras y diluya esto con el caldo.
Agregue todos estos a la cacerola y cocine hasta que note que la gallina está muy bien cocinada, es decir que esté blanda.
Bata los huevos con un tenedor en otro recipiente y agréguelos a la gallina removiendo para que estos se integren muy bien a la salsa.
En un sartén aparte, tueste las hebras de azafrán y el laurel. Una vez tostados trócelos y agregue a la salsa.
Deje que la salsa hierva, rectifique la sazón y agregue sal y pimienta al gusto. Sirva caliente y disfrute en familia.
¿Qué hacer si sobra un poco de gallina a la pepitoria?
En caso de que haya sobrado un poco de esta receta, solo colóquelo en un recipiente de vidrio o plástico, tápelo y llévelo al refrigerador. Este se mantiene bien conservado durante hasta 36 horas. Una vez pasado este tiempo, lo mejor será desecharlo para evitar una indigestión.
Tome en cuenta que una vez que ha refrigerado la gallina, lo mejor es calentarla en el microondas antes de consumirla.
Recomendaciones finales para una receta perfecta
Si lo desea, puede guisar con antelación la gallina, al menos uno o dos días antes para que la salsa se asiente. Esto también permite que los sabores se intensifiquen.
Si lo desea, puede añadir el hígado, el corazón y la molleja de la gallina en el guiso para potenciar el sabor de la salsa. De hecho, en la receta original se incluye el hígado, por lo que no sería extraño agregarlos.
Tome en cuenta que para esta receta, se debe usar únicamente las partes comestibles de la gallina, pero lo ideal es usar los muslos y la pechuga de esta.
