Escuche esta historia
--:--
5:10
Consejos para comenzar a ser ordenado
Vivimos en una época donde las distracciones abundan y el orden no es un hábito muy apreciado. Nuestra cultura ha ido deformando principios como la puntualidad, la ética y muchos otros, entre ellos el Orden.
A menudo, el desorden nos provoca estrés, falta de tiempo, cansancio y desanimo emocional.
No tienes que volverte un cronómetro, o un ser obsesionado con organizar todo, basta con hacer pequeños cambios a tu rutina diaria y veras grandes mejoras. De este modo si quieres ser más ordenado aquí te mostramos como.
¿A qué debería aplicar el Orden?
La verdad es que es un principio que se puede establecer en todas las áreas de nuestra vida.
Si sientes que tu cotidianidad es un desastre total, comienza de menos a más, el ir integrando el orden en pequeñas dosis te llevará a una transformación total.
Asume el cambio como un proyecto a desarrollar por fases, ve trabajando sobre la marcha mientras lo ejecutas, y cuando domines una pasa a un nuevo nivel.
Consejos claves para combatir el desorden en casa
Tal vez no eres muy fanático de la cultura japonesa, pero son expertos en cuanto al orden se trata y de ellos vamos a tomar algunas características útiles.
Hay múltiples esquemas y rutinas, pero abordemos los principios más básicos que nos darán una mejor perspectiva.
1. Prioriza y desecha
Acostumbramos a acumular objetos, ropa, imágenes, tareas eh incluso pensamientos que solo se amontonan en nuestras vidas sin sentido ni productividad.
En gran parte nuestra dificultad para ordenar se debe al exceso de cosas inútiles que nos rodean.
Comienza por dividir lo útil y productivo de lo que no, analiza cuáles son tus herramientas prioritarias y las cosas que más utilizas a diario.
Un examen rápido para decidir si desechas algo, es preguntarte cuando fue la última vez que lo empleaste y con qué frecuencia lo usas.
Si no deseas deshacerte de algo por su valor sentimental, acondiciona un espacio para colocarlo y guárdalo fuera de donde estorbe. Esta técnica debe ser establecida desde tu guarda ropa, hasta tu celular y tu propia mente.
2. Dale un lugar a cada cosa según practicidad
Que exista un colgador de llaves o un perchero no significa que para ti sea el lugar más idóneo para ubicar las llaves o el abrigo.
Entendiendo esto, ordena tu casa, tu habitación y tu oficina de modo que te brinde la mejor comodidad y practicidad posible.
Otórgale un sitio único a cada cosa y adecua tu mente a que es indispensable que repose en ese sitio. De esta forma, aunque muevas el objeto lo regresaras a su punto.
Todo mueble, mesa y superficie debe tener solamente la cantidad de objetos permitidos, de esta manera vences el desorden.
Conviértete en enemigo de los espacios ociosos, si tienes alguna zona a la que no se le da ninguna utilidad elimínalo, todo debe generar algún beneficio.
3. Limpia con regularidad
Hay una estrecha relación entre el orden y la limpieza, ya que se apoyan y se complementan entre sí.
El limpiar es parte de desechar lo inservible, esto te ayuda a evitar la acumulación de elementos improductivos y hacer que el ambiente sea armonioso.
No solo se trata de desechar, sino además de mantener el buen estado de lo que sí te es útil. Esta rutina de limpieza debe ser lo más constante posible, y se aplica desde tu escritorio hasta tu billetera.
4. Crea una rutina de tiempo y espacio
Luego de haber dado orden a cada espacio de tu vida para forjar el hábito debes dedicarte a mantener la organización que has creado.
Lo mejor para hacerlo es diseñar una rutina donde le dedique unos pocos minutos a cada área de tu día, donde se requiera el orden.
Por ejemplo, al levantarte inicias tomando 5 minutos para ordenar tu cama, y los objetos de tu habitación.
Otórgale micro cápsulas de tiempo, repartidas a lo largo del día en cada uno de los escenarios que frecuentes y que requieran de orden.
Los beneficios de ser una persona ordenada
En términos sencillos prácticamente en todo, el ser una persona organizada te brinda puntos positivos de manera interna y externa.
El orden es una característica que da buena imagen en el ámbito laboral y empresarial, pero además de eso también ayuda a:
Combatir el estrés
El orden es una inyección visual y mental que disipa el caos que aumenta los niveles de estrés.
Está comprobado que las personas que se desenvuelven en ambientes organizados y con un buen control de su tiempo y tareas son menos afectados por el estrés.
Tener más tiempo libre
Cuando tu hábito de ordenar es constante, el tiempo que solías invertir para organizar se vuelve un espacio para distracción.
Si tu día y tu hogar está sintonizados con cada cosa en su lugar, los momentos de recreación son más constantes.
Mejora tus finanzas
Cuando el orden se lleva a todos los niveles de la vida, dejamos de hacer gastos inútiles he innecesarios.
El impulso por darle un sitio correcto a todo puede incluso motivarnos a crear un plan de ahorros o a invertir de forma efectiva pensando en futuro.
Espero que este artículo te ayude a ser una persona más ordenada en todos sus aspectos.
