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Baby Blue, ¿mito o realidad?
Es muy común entre las mujeres que recién dieron a luz un sentimiento de tristeza y vacío que no está asociado a ningún suceso específico, y causa en ellas gran confusión y en ocasiones culpa.
No entienden cuál es el origen de este sentimiento y les confunde, ya que la creencia general es que después del parto ya todo ha pasado y solo queda felicidad por el nuevo bebé.
Sin embargo entre el 50 y 85% de las mujeres experimentan baby blue después del parto, esta es una denominación utilizada para hacer referencia a esos síntomas causados principalmente por el desbalance hormonal que viene con el posparto.
¿Es lo mismo que la depresión posparto?
La mayor diferencia existente entre el posparto y el baby blue es la intensidad y duración con la que se presentan los síntomas.
En el caso de la depresión posparto los síntomas pueden presentarse incluso meses después del parto y de igual forma durar semanas después de presentarse los primeros síntomas.
Debido a la intensidad de los síntomas presentados en la depresión posparto es recomendable acudir con un especialista de la salud mental.
Síntomas del Baby Blue
Estos son algunos de los síntomas que se pueden presentar tanto en el baby blue como en la depresión posparto.
No suelen aparecer todos en simultáneo, de ser así o en caso de ser muy intensos es posible que pueda tener depresión posparto y lo más recomendable es hablar con un especialista.
Cambios de humor repentinos
Tristeza
Ansiedad
Sensación de vacío
Problemas para dormir
Llanto fácil
Irritabilidad
Sentimientos de culpa
Pensamientos fatalistas
Sensación de agotamiento y falta energía
Cambios en el apetito
Dolores de cabeza
Trastornos digestivos
Dolores crónicos
Las principales causantes de estos síntomas son fisiológicas, luego del parto se produce una liberación hormonal que puede ser la desencadenante principal.
Sin embargo también se le suman los cambios psicológicos ocurridos y los cambios en la nueva rutina.
¿Cómo superar el baby blue?
Debes recordar que esta sensación de tristeza es muy normal, no eres culpable de que esto esté sucediendo y sobre todo, pasará.
Esta es una etapa complicada, pero con el tiempo esta sensación desaparecerá y no habrá nada que te impida sentirte plena con tu bebe.
No estás sola
Apóyate en los que te rodean para delegar aquellas tareas del hogar que se tengan que hacer diariamente.
Tu pareja y familia son tus mejores aliados en estos momentos, comunicales como te sientes y expresarles que pueden hacer para ayudarte.
También es muy beneficioso buscar grupos de apoyo para padres, mantente en contacto con otras familias que también estén pasando por esta etapa y comparte con ellos tu experiencia.
De haber asistido a clases para parto mantente en contacto con las personas del grupo, créate una red de apoyo emocional para esos momentos difíciles.
Sé comprensiva contigo
Esta etapa no es fácil, no te fuerces a asistir a reuniones sociales si no quieres, es válido decir que no y priorizar tu salud mental y el bienestar de tu bebe.
Es común que la familia y amigos quieran visitar y conocer al bebe, sin embargo si estas situaciones no te hacen sentir cómoda puedes reprogramarlas hasta que estés mejor.
Descansa
Es común que los primeros días sean especialmente agitados para ti y tu bebé, se tiene que adaptar a la nueva rutina y esto puede ser agotador.
Intenta descansar cuando tu bebé este descansando, así sea dos o tres horas, aprovecha estos momentos para ti y si no has dormido bien, usa este tiempo para recargar energías.
Todo pasa
Este proceso puede llegar a durar semanas, pero pasará, esta sensación se acabará y tu bebé estará más grande, dormirá corrido durante más tiempo y podrá interactuar más contigo.
Mantente conectada contigo
No te quedes callada, expresa lo que sientes a tus seres queridos, ellos son tu apoyo. También puedes escribir un diario para documentar este proceso y drenar esos sentimientos.
Realiza actividades para conectar contigo misma, busca espacios en los que puedes realizar algo que disfrutes y no esté necesariamente relacionado con tu bebé.
Está bien poner mucha energía en ser buena madre e identificar las necesidades de tu bebé, pero también debes recordar que eres una mujer con intereses propios y eso está bien.
El baby blue es real y afecta a gran porcentaje de mujeres, aunque está etapa es bellísima también es bastante compleja y llena de cambios, recuerda que tus emociones son válidas en todo momento y apóyate en tu pareja para un mejor funcionamiento.
