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La mejor receta de mariscos al ajillo
Es una receta española, la cual es autóctona de la gastronomía de las zonas marítimas. Además, es común conseguir este platillo en los menús de los restaurantes que se encuentran a la orilla de las playas españolas. No obstante, ha llegado a ser parte de la gastronomía de algunos países latinos.
En cuanto a su elaboración, es muy sencillo de preparar y no requieren de tantos ingredientes como los que se pensarían. A continuación, explicaremos su elaboración y demás recomendaciones para que el platillo quede perfecto.
Ingredientes de los mariscos al ajillo
Para la proteína
Calamares picados en trozos.
Carne de pescado blanco.
Camarones.
Para condimentar
Pimientos dulces.
Ají secado y molido.
Cebolla pelada.
Perejil.
Vino blanco.
Ajo.
Aceite de oliva.
Agua.
Recomendaciones y consejos para unos mariscos al ajillo perfecto
Antes de comenzar con la receta, lo ideal es cortar el ajo a la mitad y extraer el brote interno. No obstante, si eres de los que le gusta dejar este brote, también puedes dejarlo.
Limpia el calamar retirando la piel o película de los tentáculos, pues esto es un poco molesto al paladar.
Deja el camarón entero con cáscara y con sus patas para cocinarlo.
Al agua donde cocinaremos el camarón, agregáremos sal y pimienta al gusto. También añadiremos una lámina de cebolla, una rama de apio y la mitad del vino blanco.
En el agua preparada con sal pimienta, apio y demás, cocinaremos los camarones hasta que cambien de color.
Inmediatamente que el camarón cambie de color, se debe extraer y retirar la cáscara, patas y vena central. De esta forma, garantizamos que los camarones no se pasen de cocción y se mantengan del tamaño adecuado. Igualmente, la cáscara aportará un mejor sabor.
Lava muy bien los camarones bajo el grifo antes de cocinarlos.
En caso de que uses aceite extra virgen, no lo dejes humear pues esto dañará el sabor general de la receta.
Pasos para la elaboración de los mariscos al ajillo
En una sartén calentada a fuego medio, incorporaremos el aceite de oliva de manera que cubra toda la superficie y dejamos que se caliente por unos minutos.
Seguidamente, incorpora el ajo y las cebollas, pero baja el fuego y deja que se doren por unos minutos. Inmediatamente después de incorporar el ajo y las cebollas, añadiremos una pizca de sal y un poco de pimienta.
Remueve con la ayuda de una cuchara y al notar que están doradas las cebollas y el ajo, agrega los trozos de calamar y sube un poco la temperatura, al menos a fuego medio-bajo. Remueve bien para integrar con las cebollas y ajo.
Añade a la sartén los pimientos rojos, pero asegúrate de retirar la piel con anticipación. Seguidamente, incorpora el ají molido y continuamos removiendo para integrar bien.
Añade el resto del vino blanco y sigue removiendo para rehogar el calamar en la salsa resultante. Deja cocinando hasta que el vino se evapore.
Cuando notes que el vino se ha evaporado un poco, agrega la carne de pescado troceada y remueve para que se mezcle con el resto de ingredientes de la sartén.
Finalmente, incorpora los camarones y deja que se caliente un poco. No es necesario que se cocine demasiado, sino que se caliente, pues el camarón ya debe estar cocido.
Apaga el fuego de la estufa al cabo de un minuto y añade un poco de perejil picado para decorar en el mismo sartén.
Sirve en los platos y disfruta caliente.
Variaciones de esta receta
Si gustas, puedes usar mantequilla conjuntamente con el aceite de oliva, para que la salsa quede un poco más clara. Otra opción es usar un poco de crema de leche o crema líquida, pero esto es completamente opcional.
No dudes en usar vino tinto o rosado si no tienes vino blanco, aunque esto no es lo más común. Otra opción es usar un poco de jerez.
Si eres amante de las plantas aromáticas en las comidas, puedes usar un poco de albahaca picada finamente para decorar junto con el perejil. Pero no uses demasiado, pues esconde el sabor del ajo.
Otro complemento ideal es el limón, el cual si bien se agrega al gusto al servirlo en los platos, puedes añadir unas gotas del zumo al terminar de cocinar o al momento de servir.
En caso de que no quieras agregar pescado o calamar, este también se puede preparar solo con camarones. Solo que así el nombre de la receta cambiaría a "camarones al ajillo".
¿Con qué debería de servir los mariscos al ajillo?
Los mariscos al ajillo se pueden servir con prácticamente cualquier complemento, pero lo ideal es acompañarlo con un complemento que puedas rehogar en la salsa. Por ejemplo, un buen contorno es el arroz. De hecho, puedes servir los mariscos justo en medio del arroz.
Otra buena opción de complemento son los patacones. Estos son rebanadas de plátano verde frito, aplastados y condimentados con sal y pimienta al gusto. Son ideales para este plato por lo bien que se complementa la textura crujiente de los plátanos con lo suave y jugoso de los mariscos.
Igualmente, se pueden acompañar con rebanadas de pan frito, o simples hogazas de pan, para rehogar en la salsa. No obstante, no rehúses en acompañar con una ensalada de tu preferencia, pues esta sería perfecta para degustar con los camarones.
¿Cómo debo guardar los mariscos al ajillo?
En caso de que te haya sobrado un poco de mariscos, lo ideal es resguardarlo en un recipiente bien cerrado, en el refrigerador. No debe importar si el recipiente es de vidrio o plástico, pues igual se conservará bien la comida siempre y cuando esté bien cerrado.
Aun así, toma en cuenta que no debe pasar más de 24 horas en el refrigerador, pues al cabo de este tiempo la comida puede tornarse ácida. Además, al momento de servir los mariscos al ajillo, debes calentarlo en el microondas y comer caliente.
Conclusiones de la receta
Los camarones al ajillo es un tipo de platillo perfecto para comer durante una cena elegante en donde desees sorprender a tus comensales con una receta sencilla, pero elegante. También es perfecta para una rápida cena o almuerzo en las temporadas veraniegas.
Es por ello que te recomendamos intentar hacer esta receta en casa y aportar tu toque personal.
