El juego del calamar y el k-pop
Tenemos un éxito rotundo de Netflix, que está inundando las redes sociales: “El juego del calamar”, que combina una fina crítica social, que ya hemos visto en películas como “Parásitos” con una muestra de lo frágil que es un sistema que tendemos a idealizar los que vivimos en los países en vías de desarrollo.
¿Cuál es la razón del éxito de esta serie? Pues sepa usted, lo único que nos queda es la suposición, el morbo, el sadismo. El sentimiento de cómo nos identificamos con problemas económicos, tal vez es una muestra de que cada vez los sentimos más cercanos y reales.
¿Seríamos capaces de arriesgar todo lo que nos queda para tener un futuro mejor? Quizás no lo sabemos a ciencia cierta, pero estamos seguros de que varios de nuestros vecinos sí se apuntarían en estos jueguitos. Si bien no sabemos cuántos se quedarían apenas vean y vivan en carne propia, los primeros peligros.
En Corea del Sur tenemos a otra realidad muy distinta del mundo occidental que desde hace varios años está lanzando éxitos al mundo entero: se trata del mágico k-pop, que ha dado una gran sorpresa destronando a ídolos occidentales e introduciéndose de forma cada vez más constante en los gustos de todo el globo terráqueo.
El k-pop está creando una cultura diferente, donde las bandas se están convirtiendo en los reyes de las redes sociales y sabemos que, actualmente, quien gobierna las redes, gobierna el mundo entero. Ese es uno de los tantos cambios introducidos por la globalización.
Los grupos que serían seleccionados
Aprovechando el éxito de Netflix, imaginemos ese juego entre los nuevos grupos de k-pop, solo por mencionar algunos: Ciipher, Blitzers, About U, NTX, Omega x , Purple Kiss, Godes, Sigma, Tea Party, Lightsum, Mirae, y Wow.
Muchos jóvenes que harían lo que sea por convertirse estrellas, que harían un reality que combinaría la música de moda, con la serie de moda y muchos jóvenes influencers que ya están recibiendo la atención del mundo entero. Tal vez, ese furor se replicaría entre sus fanáticos, pero quién sabe.
Y no olvidemos la pregunta del millón, ¿quién ganaría? Pregunta complicada, considerando que todos los varones de Corea del Sur están obligados a hacer el servicio militar.
Ese acto obligatorio les da un plus en el arte de la sobrevivencia y mayores capacidades físicas. En el caso de las mujeres, tendrían el concurso más complicado, ya que no están obligadas a realizar el servicio militar. Si fueran israelitas sería otra historia.
Dentro de Ciipher, nuestra apuesta sería por Tan. Después de todo, tiene capacidades físicas por encima del promedio. Considerando que casi todos sus integrantes salieron de realitys de canto y baile. Por lo que, asumimos que son competitivos y al menos están en buena condición física.
En cuanto a la banda Blitzers, pensamos que quien tiene más posibilidades de ganar podría ser Juhan, por su afición al Tae Kwon Do. Aunque no olvidemos que todo esto es una mera especulación.
Dentro de About U, definitivamente nuestra apuesta es por Víctor. Si eres un fanático de la banda sabrás por qué. Aunque también debemos considerar que romper unas baquetas no lo convierten inmediatamente en un rockstar agresivo, o lo que consideramos según los modelos occidentales. Donde en las bandas tradicionales, hasta los que aparentan ser los más inofensivos e inocentes son capaces de lanzarse al público, impulsados por la adrenalina que brota a raudales en un concierto en vivo.
Dentro de Omega X, apostamos por todos. Debes considerar que son “reciclados” por decirlo de manera elegante. Y algo han hecho por tener una segunda oportunidad.
Ahora bien, si les damos tantos puntos a este último grupo, se los tenemos que quitar a los otros.
Debemos considerar que el mundo del k-pop es extremadamente estresante y competitivo en Corea del Sur. Así que llegar dos veces a ser parte de un grupo con grandes proyecciones y posibilidades de éxito, quiere decir que son personas que saben aprovechar las oportunidades, así que tienen muchas posibilidades de resultar ser los ganadores.
Otros grupos que podrían dar alguna sorpresa
Dentro de Purple Kiss, pues la verdad, no le vemos mucho futuro. Consideramos que serían las primeras en morder el polvo. Tal vez esta sea una apreciación que pueda sonar propia de un misógino, pero seamos realistas, nadie podría creer que el baile y las coreografías vistosas les den muchas opciones de sobrevivencia. Aunque nunca se sabe.
Dentro de Godes, creo que podríamos rescatar a Ye Jin. Consideramos que su afición por el montañismo puede ser de gran ayuda en este juego. Aunque podrían criticar que solo estamos haciendo apreciaciones según la base física y no considerando la fortaleza mental. Pero debemos recordar que todos son partes del mismo mundo y creemos que tienen los mismos intereses, por lo que podríamos decir que están parejos en ese aspecto.
En cuando a la banda Sigma, podemos decir coloquialmente que estos japoneses se las traen. Si alguna vez han pensado quién puede ser más resistente: si un japonés o un coreano, creemos que este evento puede ser un buen lugar para quitarnos esa duda de una vez y para siempre. Apostaríamos por el líder del grupo: Z-uk.
Dentro de Tea Party, creemos que es un grupo pequeño que es solo conocido por unas pocas actuaciones. En este caso, tampoco le vemos mucho futuro. Inclusive puede ser considerado como más débil que Purple Kiss.
En el caso de Lightsum, consideramos que es otro grupo al que no le apostaríamos ni para ir a favor de la probabilidad más remota. Creemos que solo serían parte del “relleno” que necesitamos para contar con un número considerable de participantes.
Dentro de Mirae, nos atrevemos a decir que es un grupo de k-pop del que no tenemos mucha información y no nos otorga mayor seguridad. Creemos que no pasarían de los primeros minutos del juego, pero uno nunca sabe lo que puede suceder.
Dentro de Wow, pues podemos rescatar que tiene otro tipo de perfil. Para su selección se priorizó la actuación. Y todos sabemos que los actores son seres camaleónicos, así que en este caso creo que alguno podría ser un posible ganador. Pero nuestra apuesta es por la banda en su conjunto, no por un personaje de manera individual.
Algunos detalles particulares del juego el calamar
Después de dar algunas aproximaciones de quien puede ganar o no, concentrémonos en el juego. En muchos otros países, es más conocido como “semáforo”. En el cual hay una persona delante que va alternando entre las palabras rojo y verde.
Cuando mira al frente dice verde, y todos se mueven. Cuando voltea dice rojo, y los otros jugadores deben quedarse inmóviles. Si se mueven, pierden. Reglas simples para un juego infantil.
En la serie de Netflix, que está basada en ese juego y tal como se practica en Corea del Sur, se hacen unos dibujos en el suelo y se puede ver una especie de muñeca gigante en el centro.
Si alguno se anima a llevarlo a cabo en la práctica y montar un negocio sobre el tema, pues podría a tener mucho éxito. Pueden utilizarse armas de paintball o airsoft, si quieren poner un poco más de realismo.
Por otro lado, consideramos que en Corea del Sur, deberían de innovar un poco más. Ya que vemos muchos concursos de reality basados solamente en la música y el canto. Pero poner el énfasis en otro foco, podría contribuir a renovar un poco más el panorama musical y artístico en general.
