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Aprende a decorar con un Chesterfield según el estilo que deseas
Recrea tu sala con el sofá más famoso y elegante de todos los tiempos
Aunque no hayas escuchado su nombre, a simple vista lo reconocerás, ya que este sofá ha tenido una larga historia que nunca a pasado de moda, por ello no es de sorprender que miles de personas busquen a diario cómo decorar con un Chesterfield.
Los Chesterfield son un clásico entre los muebles para el diseño de interiores, pero es su versatilidad la que lo ha puesto siempre en la lista de tendencias para salas.
A pesar de que su origen estaba sujeto a fines masculinos de la clase alta, hoy más que nunca podemos ver como se adapta a un sin fin de estilos.
Pero si aún no estás seguro de comprar este tipo de mueble o tienes uno antiguo guardado, aquí te aclararemos todas tus dudas con el fin de que aproveches al máximo su imagen.
Integra un sofá Chesterfield con estas geniales ideas
Muchos no se atreven a integrar este tipo de mueble a su diseño de interior por el hecho de ser un modelo clásico, y al tener una gran variedad de estilos actuales de decoración, el miedo de que no se mezcle con la temática es grande.
Esta pieza cuenta con gran versatilidad, debido a que grandes diseñadores han renovado su imagen al cambiar su tapizado y algunos detalles de su estructura, eso sí, sin cambiar su forma característica.
Es por ello que podemos ver una gran variedad de modelos de Chesterfield, los cuales te mostraremos con el fin de que sepas como encajan a la perfección con el estilo actual que deseas plasmar.
Chesterfield blanco para decoración vintage
Este es el primer elemento que se considera al buscar una imagen vintage, ya que su forma clásica y antigua es justo lo que se requiere para este estilo.
El estilo vintage lo puedes expresar de diferentes formas, ya sea direccionado a un estilo más industrial, uno masculino, moderno o clásico, para cada uno existe un Chesterfield con detalles en su tapizado que acentuarán los rasgos del diseño general.
Si nos enfocamos en un vintage moderno, opta por un mueble de color blanco o beige tapizado con textil de algodón u otro material parecido, su aspecto resaltará el estilo decorando por si solo.
Aun así en este estilo puedes jugar con los tonos pasteles, por lo que puedes escoger un Chesterfield en rosa pálido, lila o azul claro.
Para acompañarlo, puedes buscar otras piezas de aspecto antiguo, como relojes grandes, mesas y lámparas clásicas.
Recuerda manejar una paleta de colores que se fusione a la perfección con el mueble, tonalidades como el blanco, beige, marrón y negro son claves para dar un aspecto vintage.
Chesterfield de cuero para estilo industrial
Si se busca un estilo más industrial, la opción en bandeja es el tapizado en piel original, el cual se fusionará con los elementos industriales fácilmente.
Para crear un ambiente más familiar o genérico, opta por un cuero marrón clásico, este con el pasar de los años mantendrá su exquisita imagen sin desentonar.
A su vez logra combinarse con diferentes tonos de la paleta de colores de este estilo.
Sin embargo, si deseas toda la fuerza de este tipo de diseño, puedes optar por tonos más oscuros como el negro, azul marino, gris oscuro y marrón caoba.
Estos tonos encajan a la perfección con elementos metálicos, ladrillos, carbón, madera y el concreto, los cuales son claves en esta decoración.
Terciopelo en tonos vibrantes para estilos modernos
Las tendencias de estilos modernos demuestran un nivel de sofisticación a raíz de la integración estratégica de tonos llamativos, y en este caso el protagónico se lo lleva el Chesterfield, robándose toda la atención creando un ambiente actual.
Si a este le sumamos el material de terciopelo, no nos sorprende que este tipo de sofá sea una tendencia en estilo para salas de este año.
Y cómo no serlo, si cuenta con 3 factores que lo hacen atractivo, comenzando por su estilo clásico presente en su forma, la variedad de tonos vibrantes, junto a la textura suave y aspecto elegante del tapizado, todo en un solo mueble.
La regla con ellos es que al elegir un color para el sofá, tu paleta de tonos para el resto de la sala debe mantenerse sutil y hasta neutral, siendo tonos como el blanco, beige y el gris los más acertados para combinar con este mueble.
Entre los colores vibrantes puedes escoger el azul naval, amarillo, rojo, rosa borgoña, mostaza, verde oscuro, verde esmeralda, naranja y mostaza.
Todo está en que sepas cuáles colores bases o neutrales van en las paredes y el resto de las decoraciones modernas, equilibrando el ambiente y destacando lo llamativo del mueble.
Entre colores y texturas, los Chesterfield marcan gran estilo en donde quiera que lo coloques, arriésgate con una propuesta clásica de muebles, que renovará de manera moderna tu hogar.