La vida es el camino
Se necesita mucha humildad para entrenar el propósito de vivir sin juzgar, para no empeñarse tozudamente en que lo que ocurre sea como yo quiero, que las personas se comporten de la forma en que creo que se deberían comportar, que todo lo que sucede a mi alrededor sea perfecto, sin una sola "mancha" que me incomode y me fastidie. Se necesita mucha, pero mucha humildad para aceptar sin resignarse, para estar alerta a las verdaderas aspiraciones y no a los deseos de la mente.
¿Entonces debería quedarme impasible ante lo que yo considero una injusticia, no debería afanarme por conseguir cambios en la conducta de las personas que me rodean y con quienes me relaciono?
Pues, mire Usted: tal vez ahí está el meollo del asunto, la magia de la dualidad en que vivimos en este plano tan maravilloso. Vamos a ejemplificar y tratar, solamente tratar, porque no estoy seguro de conseguirlo, de aclararnos un poco más.
Vamos a suponer que no le guste a Usted la conducta de su hijo en este momento, que está demasiado tiempo con el móvil en la mano y no presta atención a otra cosa, está embebido, atrapado en las redes sociales, viviendo on line, hasta cuando va al aseo quiere llevarse el móvil. "esto no puede ser así", piensa Usted. Entonces lo llama para tener una conversación sobre eso, le riñe, le amenaza con tomar medidas, usa un tono duro y de ordeno y mando, "y mientras estés bajo mi techo, harás lo que yo te diga" Puede ser también su pareja, su hermano, un subordinado en el trabajo. Puede ser el comportamiento generalizado de las personas, en el momento actual. Y a Usted "no le gusta, no lo acepta, piensa que no debería ser así y se incomoda, se preocupa, ¿dónde va este mundo?
También puede observar lo que ocurre desde la curiosidad y el asombro, puede ver y sentir lo que ocurre cuando las personas se comportan de ese modo, que resultados les trae, preguntar de forma respetuosa a algunos que le comenten sus experiencias, tomar la vida como si fuera un laboratorio y entonces, actuar Usted de la forma en que perciba que es su aspiración: alejarse un día a la semana de las redes, del móvil, mostrar comprensión por quienes no deseen hacerlo, tener una conversación respetuosa sobre el tema, donde primero "trate de entender con sinceridad la conducta de otros, y después trate de ser entendido"
¿Tiene prisa? respire y acepte, tenga confianza en la vida, diga en voz alta cuando esté solo: ¡Para algo será, hay una inteligencia que mueve galaxias allá afuera, que fabrica hojas del naranjo, que hace que cada una de mis células haga cientos de funciones a la vez! ¿será posible que se equivoque en algo, existirá algo casual, algo que se escapa de esa divinidad que está en todo?
Puede ser que la vida sea el camino. Y al verlo de esa forma, es posible que el sufrimiento comience a disolverse, comience a dar paso al gozo de vivir.
