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Equipo multidisciplinario elabora una nanotecnología enfocada en resolver problemas neurales
Un equipo internacional de investigadores desarrolló una fibra óptica que puede determinar algunos patrones para tratar enfermedades cerebrales como los tumores y las patologías degenerativas como el Alzheimer.
A cargo de esta tecnología se encuentra un grupo internacional conformado por el Instituto Italiano de Tecnología en Lecce (IIT-CBN, Italia) y algunos científicos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO).
Cabe destacar que esta investigación lleva gestándose desde el año 2019 y en estos momentos logró dar frutos tangibles. Con un diámetro que es inferior al de un cabello humano, esta nanoestructura contiene plasmónicas que son las que ayudan a la luz a viajar a través de las estructuras cerebrales y así conocer un poco más de ellas.
Las plasmónicas generan una reacción con la luz y estudian a fondo las células cerebrales pudiendo encontrar patrones que visualicen las enfermedades ya comentadas para su diagnóstico y tratamiento a tiempo.
Para definir este proyecto, la investigadora y directora de la aplicación neurocientífica del proyecto y experta en el estudio de la epilepsia, Liset Menéndez de la Prida expresó que:
“Se trata de una fibra óptica modificada para enviar y recibir luz. La sonda permite iluminar las moléculas del tejido cerebral y amplificar la luz que estas reflejan, generando patrones espectrales en función de las propiedades de cada tipo de molécula”.
Las fibras desarrolladas por este grupo de investigadores, además de innovadoras, son mínimamente invasivas en comparación con otras técnicas médicas en donde también se utiliza la luz como punto de avance en el descubrimiento y estudio de las células.
Manuel Valiente, investigador del CNIO y coordinador de esta aplicación para el descubrimiento y tratamiento del cáncer, también agregó:
“Este primer trabajo de Nanobright confirma que técnicamente podemos pasar a la segunda etapa para testar estas preparaciones en los modelos experimentales de cáncer, y poder en un futuro mejorar la capacidad de diagnóstico y tratamiento de los tumores cerebrales”.
Es de hacer notar, que la Comisión Europea ha financiado este proyecto con una suma de 3,5 millones de euros a través de FET (Future and Emerging Technologies). Cabe acotar que este es uno de los sistemas de financiamiento tecnológico más prestigiosos de la Unión Europea.
Un trabajo que duró dos años
“Es la primera sonda terminada dentro del consorcio. Durante estos años se ha logrado la tecnología y hacer los testados iniciales. Es una historia de éxito”, comentó la investigadora Meléndez destacando la duración de dos años de trabajo.
En este proyecto colaboraron muchos científicos multidisciplinarios en los cuales estuvieron nanotecnólogos, biólogos tumorales, físicos y neurocientíficos expertos en trastornos neuronales.
El Grupo de Metástasis Cerebral en el CNIO va a utilizar esta aplicación para poder discriminar los tumores cerebrales de los metastásicos. De igual forma, poder utilizar la luz para permeabilizar la barrera hematoencefálica para así ayudar al cerebro con el acceso de medicamentos antitumorales.
