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Fuentes de poder: ¿Comprar certificada o no?
Un ordenador está compuesto por muchos componentes, cuando decides renovar tu ordenador, una de las cosas más sobrevaloradas son las fuentes de poder. Esta es la encargada de suministrar el fluido eléctrico a tu ordenador.
Sin embargo, a pesar de esta función tan importante, las personas no suelen prestar demasiada atención a la compra de una de estas. Esto se debe a varias razones, por ejemplo, una fuente puede durarte muchos años, pero también, muchas personas no saben cómo elegir una adecuada.
Es bastante usual que las personas compren una fuente de poder de la mayor cantidad de watts posible y es todo. Sin embargo, hay más cosas en las que debes prestar atención, por ejemplo, si la fuente es certificada o no.
Vamos a hablar un poco más sobre esto y te diremos cuáles son esas cosas que debes tener en cuenta para poder comprar una de manera adecuada.
¿Qué es una fuente de poder?
Una fuente de poder o fuente de alimentación es un componente que se encarga de abastecer a un ordenador de electricidad. Esta funciona como un transformador, ya que se encarga de recibir la corriente alterna (AC) y la convierte en corriente directa (DC).
A su vez, esta se encarga de bajar el voltaje de los 120 voltios a 12,5 voltios que es lo que requiere un ordenador. Adicionalmente, se encarga de mantener el voltaje en los rangos adecuados para evitar que algún componente del ordenador pueda estropearse por una sobrecarga.
En este sentido, tenemos que las fuentes de poder cumplen una función vital para el buen funcionamiento de cualquier ordenador. Es por ello que la elección de una adecuada para tu ordenador es algo sumamente vital que debes tener en consideración.
¿Qué debes tener en cuenta a la hora de comprar una fuente de poder?
Si vas a cambiar tu fuente de poder, ya sea porque se ha dañado o porque has comprado un nuevo ordenador y la que tenías no es suficiente, a continuación te diremos cuáles son esas cosas que debes tener en cuenta a la hora de realizar la compra.
Con esta pequeña guía de compra vas a poder aprender a elegir una fuente de alimentación perfecta.
1. El presupuesto disponible
El presupuesto que tengas es una parte vital de todo el proceso de compra de una buena fuente de alimentación. Debes determinar cuánto dinero estás dispuesto a invertir para la compra y, a partir de ahí vas a poder empezar a buscar.
Por fortuna, las fuentes de poder no son demasiado costosas, por lo que no vas a tener que invertir demasiado dinero. Por menos de 200 dólares puedes tener una excelente fuente de poder que te va a durar por mucho tiempo.
Así que, determina tu presupuesto antes de empezar, esto también te ayudará a gastar la menor cantidad de dinero posible.
2. El consumo de tu ordenador
Cada uno de los componentes de tu ordenador tiene un consumo, este puedes encontrarlo en la etiqueta, la caja o en el sitio web del fabricante. Esto te va a ayudar a determinar cuál es el consumo total, lo que te va a ayudar a que puedas saber el tipo de fuente de alimentación que necesitas.
Deberás sumar todos los consumos que tiene cada componente para conocer el consumo total de tu ordenador. Una vez que lo tengas calculado, vas a poder empezar a buscar una fuente de poder que se adapte a tus necesidades.
3. La cantidad de cableado que necesitas
Las fuentes de poder más económicas del mercado, por lo general, suelen estar algo limitadas en este aspecto. Es decir, suelen tener pocos cables, lo que para un ordenador gamer por ejemplo, pueden ser insuficientes. En este caso, debes conocer exactamente cuanto cables y de que tipo necesitas.
Hoy en día hay fuentes modulares, esta te permiten agregar o quitar cables dependiendo de tus necesidades. Esta es una gran ventaja, pero también tienen una desventaja y es que suelen ser más costosas.
Si tiene un PC gamer, lo ideal es que elijas una fuente de una buena marca, ya que cuentan con más conectores. Y si tienes el suficiente presupuesto, puedes elegir una fuente modular, que es la mejor opción a día de hoy.
4. La potencia de la fuente
Ya tienes el consumo de tu ordenado y la cantidad de cables que necesitas, ahora puedes empezar a elegir una buena fuente. Estas vienen de diferentes potencias y debes elegir una adecuada.
Por ejemplo, supongamos que el consumo total de tu ordenador es de alrededor de 600 W. Muchas personas pensarán que una fuente de 650 W va a ser suficiente, pero este es un grave error.
Las fuentes de alimentación no garantizan el 100% de la potencia que indican. Esto se debe a que una gran parte de la potencia se termina perdiendo. El porcentaje que vas a obtener va a depender principalmente de la calidad de la fuente.
Si la fuente es genérica, deberás calcular que te dará como mínimo un 60% de la potencia. Es decir, que para un consumo de 600 W debes elegir una fuente de unos 1.000 W.
En el caso de que la fuente sea certificada, vas a poder tener un poco más de holgura, ya que estas garantizan como mínimo un 80% de la potencia. Así que, siguiendo el mismo ejemplo, con una fuente de unos 800 W va a ser suficiente.
5. La certificación
Las fuentes de poder se clasifican en cuatro categorías, las estándar, clasificación bronce, plata y oro. Esta clasificación está relacionada con la eficiencia energética de la misma y, por supuesto, con la garantía que ofrecen.
Si cuentas con una certificación de bronce+ para arriba, vas a poder gozar de hasta un 80% de la potencia indicada en la etiqueta. Sin embargo, las fuentes certificadas son más costosas que una estándar.
6. La marca y la calidad
La marca de la fuente es algo muy importante, especialmente porque está estrechamente ligada con la calidad. Siempre es recomendable comprar una fuente calidad si tu presupuesto te lo permite.
Estas están hechas de materiales de alta calidad, lo que hace que duren por mucho más tiempo. Además, estas suelen generar una menor cantidad de ruido en comparación con las fuentes más económicas.
Una de las mejores marcas que fabrica fuentes de alimentación es Cooler Master, aunque no es la única. Elegir una fuente de calidad significa que también es más confiable, por lo que es algo a tener en cuenta.
¿Es mejor una certificada o una genérica?
Esta es una pregunta que muchas personas se hacen y la cual es una parte muy importante de la elección de una fuente. Ya sabemos que la principal diferencia que hay entre una y otra es la garantía que tienen en relación con la potencia final que entregan.
Además, las fuentes de alimentación certificadas cuentan con una mayor calidad que las estándar. Así que, por lógica, estas son mejores y deben de ser tu principal opción, especialmente si estás armando un ordenador gamer.
Esto no quiere decir que las fuentes estándar sean malas, estas pueden durarte varios años sin mayores problemas. Sin embargo, debes elegirlas sabiamente para que puedas tener la suficiente cantidad de potencia para mover tu ordenador sin problemas.
