Logran construir el microchip volador más pequeño del mundo
Con el fin de poder diseñar los llamados microfliers, recientemente se ha creado por medio de la investigación sobre los estudios de la aerodinámica, que existen varias semillas de plantas, las cuales atrapan el viento para así poder caer lentamente.
En función a ello, han creado un microchip con alas, el cual posee el tamaño de un grano de arena y se ha convertido en el dispositivo más pequeño del mundo, fabricado por el ser humano y que además tiene la capacidad de volar.
Este nuevo microflier, así como lo han denominado sus inventores quienes son de la Universidad de Northwestern, aseguran no posee ningún tipo de moto el cual lo impulse.
En cambio, este es capaz de moverse con el viento a tal punto que parece la semilla de un árbol de arce.
Una de las maravillas de este artefacto, es el hecho de que el mismo gira como si de un helicóptero por el aire se tratara, haciendo que su aterrizaje sea suave y bastante ligero.
Una de los ases de este estudio, fue el análisis sobre los arces y así mismo otros tipos de semillas las cuales son dispersadas por el viento.
Al realizar diferentes pruebas, los ingenieros llegaron a optimizar la aerodinámica del microflier, para así poder garantizar la caída del elemento a velocidad lenta y controlada.
Este tipo de comportamientos ayuda a estabilizar su vuelo, asegurando así la dispersión dentro de un área amplia, lo cual aumenta la cantidad de tiempo que se interactúa en el aire.
Todos estos elementos son ideales para poder monitorear la contaminación que existe en el aire, así como las enfermedades que son transmitidas por el mismo.
Los avances y beneficios que podemos obtener con este descubrimiento
Así como las estructuras voladoras, nos han ayudado con diversos datos meteorológicos, los microfliers también pueden ser empaquetados como parte de tecnología ultra miniaturizada, la cual también incluye algunos sensores, fuentes de energía o antenas ideales para la comunicación inalámbrica.
Cada uno de ellos, viene integrado con una memoria para que pueda ser almacenada.
El objetivo era añadir el vuelo alado a todos los sistemas electrónicos que existieran a pequeña escala, con el fin de que estos se encuentren capacitados para la distribución de algunos dispositivos electrónicos de manera miniatura; los cuales además, son altamente funcionales para poder detectar en el entorno niveles de contaminación, vigilancia de población o incluso el seguimiento de algún tipo de enfermedades.
¿Cuál fue el motor de dicha tecnología?
Esto se logró gracias a los cientos de ideas inspiradoras, que se pueden ver día a día, dentro del mundo biológico.
A lo largo de millones de años y gracias a la naturaleza, la misma ha podido diseñar diferentes tipos de semillas, las cuales cuentan con patrones y elementos únicos, además de una aerodinámica muy sofisticada.
Tomado prestados algunos de estos conceptos sobre diseño natural, nos hemos adaptado y estudiado, lo suficiente como para aplicarlo a diversas plataformas de circuitos electrónicos, lo cuales además sirvieron como punto d partida en todo este mundo.
Por lo general, la mayoría de las personas han visto la semilla de la hélice, como una hoja de arce la cual gira en el aire y con ello tiene la posibilidad de aterrizar de manera suave en la acera.
Este es tan solo uno de los tantos ejemplo, sobre cómo la naturaleza desarrolla métodos sofisticados con el fin de poder aumentar la supervivencia de algunas plantas.
Este sistema garantiza que las semillas se dispersen de manera correcta, además de abarcar un mayor rango de área, lo cual ayuda a la propagación de las plantas y árboles sedentarios.
Para poder diseñar los microfliers, el equipo logró estudiar la aerodinámica de diversas semillas, inspirándose de manera mucho más directa en la planta de tristellateia, la cual es una enredadera en flor, cuyas semillas en forma de estrella, poseen un diseño único para su propagación.
Estas semillas de Tristellateia poseen alas afiladas, las cuales atrapan el viento para así poder caer con un giro lento y giratorio, lo cual las ayuda a lugar a distancias más largas y con mayores posibilidades de éxito.
Equipo desarrollador, ayudó además en la creación y construcción de diferentes tipos de microfliers, además de uno con tres alas, el cual se encuentra optimizado para dar algunas formas y otros ángulos, los cuales son similares a las alas de la semilla de tristellateia.