Disbiosis intestinal
¿Cómo puedes prevenir las disbiosis intestinal llevando una dieta equilibrada?
Gracias a los avances tecnológicos, hoy en día se puede tener acceso a una variada y suficiente información sobre la disbiosis intestinal. Esto ha permitido a millones de persona ampliar conocimientos en su tratamiento y prevención.
En el campo de la medicina ha servido de apoyo con relación a un problema o situación en particular.
En el desarrollo de este artículo se comparte información sobre una enfermedad quizás no tan común para algunos, pero si conocida por los especialistas en el conocimiento médico.
Se trata de la Disbiosis Intestinal. Es una patología que se manifiesta debido a la falta de equilibrio entre las bacterias que se encuentran en el intestino, exactamente en la flora intestinal.
Estas bacterias son bifidobacterias y lactobacilos, encargadas de realizar el proceso de absorción de los nutrientes y llevar a cabo la digestión, además intervienen en la producción de vitamina K y B, lo que ayuda a fortalecer el sistema inmune.
Generalmente los problemas de esta enfermedad son producto de un estilo de vida poco saludable y una alimentación inadecuada, estos factores hacen que vayan disminuyendo las bacterias buenas e incrementando las malas.
Los problemas más comunes pueden ser el consumo de tabaco o alcohol, antibióticos, azucares, proteínas y grasas en exceso, estrés, insomnio, entre otros.
Todo lo anterior, provoca modificaciones o alteraciones en la flora intestinal que hacen muy sensible a la persona que padece este tipo de enfermedad, y en la mayoría de los casos dan paso a otras patologías como inflamaciones intestinales, gases, estreñimiento, fatiga generalizada, y colon irritable.
Cabe destacar que siempre es necesario considerar adoptar un estilo de vida saludable con una dieta balanceada, para logar un estado de salud óptimo.
En el caso de la disbiosis es vital y necesario para prevenirla, acompañada de una buena rutina de ejercicios que le den vitalidad al cuerpo y a la mente.
Considerando que según información médica la flora del intestino, se compone de más de 90% millones de bacterias, de este porcentaje menos del 12% de ellas son malas, el resto son indispensables para que el organismo funcione de forma adecuada.
Todas estas bacterias, se multiplican y alimentan por lo que se come o ingiere, es por esta razón que es importante el consumo de alimentos de probióticos, prebióticos y antibióticos.
Alimentos probióticos
Son todos los alimentos en donde los microorganismos se mantienen vivos, pegándose a la mucosa del intestino para de esta forma motivar a los llamados jugos digestivos, logrando un buen proceso digestivo.
Los alimentos en este caso que se aconsejan
Suplementos lácteos o productos fermentados como por ejemplo aceitunas, repollo fermentado, yogurt, leche, chocolate negro, y muchos otros.
Alimentos Prebióticos
En este grupo se incluyen aquellos alimentos que no llegan hacer procesados por el organismo. Como por ejemplo de ellos se encuentran patata, cebolla, banana, alcachofa, ajo, esparrago, avena y trigo.
Por otro lado según estudios realizados por especialistas en el área pueden corroborar que los alimentos prebióticos también son importantes para mejorar la absorción de minerales como el hierro, magnesio y calcio.
Consumo de vino tinto
Otro alimento que ayuda mucho en esta enfermedad es el consumo de vino tinto, porque su alto contenido de polifenol, el cual ayuda favorablemente a la flora intestinal, contrarrestando las bacterias malas que hacen daño al organismo y favoreciendo a las buenas.
También se recomienda evitar el consumo excesivo de proteínas para evitar la multiplicación y expansión de las células malas dentro del sistema digestivo.
De todas formas ante cualquier enfermedad siempre es necesario e importante consultar al médico o especialista, para someter a consideración su opinión respecto a la enfermedad.