Expertos explican las condiciones para preparar un café fuerte y saludable
No hay que ser un barista experto para preparar un buen café en casa, pero es necesario prestar atención a una cantidad de detalles en el proceso, los cuales hacen mucha diferencia en el resultado final.
Es más, muchos expertos en café han estudiado los principales fundamentos del café y como estos inciden en el sabor de la bebida.
En este caso nos estamos refiriendo en la proporción, en el molido, en el agua y en la frescura del café. Si no sabes que son, a continuación detallaremos en qué consiste estos principales fundamentos en los cuales está basado el café.
Fundamentos que tiene la preparación del café: Proporción
Utilizar una correcta proporción entre café y agua, es fundamental para elaborar una buena taza de café caliente. La regla universal con la cual se prepara la bebida es por cada 10 gramos de café se necesitan 180 mililitros de agua.
Sin embargo, muchas personas pueden considerar esta clase de cafés muy concentrados, pueden rebajar la intensidad echando agua caliente en la taza cuando ya el café esté listo.
No es muy recomendable preparar con menos agua de la sugerida, 10 gramos de café, ya que al hacerlo se obtendría un café más amargo de lo ideal, esto es debido a que una cantidad muy poca de agua, no logrará extraer todos los matices de los granos que tenga el café.
Por lo cual si se quiere un café más concentrado o más fuerte, lo mejor que se puede hacer es variar con los granos de café utilizados.
El molido del café
El molido o la molienda es otro aspecto a destacar en la preparación de un buen café. Porque es este proceso el encargado de convertir el polvo el grano de café, para luego hacerlo en bebida caliente.
Este paso debe hacerse de manera adecuada para preservar los aromas y el sabor original del café, por eso lo más recomendable es molerlo uno mismo, que comprarlo molido.
El molido puede ser desde, grueso, medio y fino. Cada molienda está hecha para un tipo de cafetera:
Molienda gruesa: Este tipo de molienda es apta para las preparaciones que son lentas en cafeteras de embolo, y es en este tipo de cafeteras reposan por bastante tiempo los granos de café, liberando todas sus propiedades y aceite. Siendo la bebida bastante suave.
Molido medio: Esta preparación está más relacionada con las cafeteras de filtro, siendo perfecta para este tipo de cafeteras.
Molido fino: La más recomendada para aquellas maquinas de espresso. Ya que el molido debe ser fino, para que se elabore el café de forma rápida y se extraiga todos los matices del grano, lo cual queda un café amargo.
El agua a utilizar en el café
Muy pocas veces reparamos en el agua que utilizamos en la infusión, pero nos enfocamos más en los granos de café. Lo cual es un error porque se necesita agua de calidad para conseguir un buen café, es por ello que filtrar el agua es aconsejable en estos casos, de manera de que la misma sea fresca y limpia.
La frescura del agua y del café
El propio café y el agua deben de ser frescos para poder obtener un buen café. Sobre todo el café debe ser guardado en un recipiente hermético y opaco a una temperatura ambiente. De igual manera la humedad, la luz y el calor pueden llegar a cambiar el sabor del café.
Dicho de otra manera, lo importante es mantener la frescura, sin pasarse a querer tenerlo frío; por lo que en este caso no es para nada recomendable guardar el café en la nevera. Ahora bien, el café molido suele conservarse menos que el café en grano, por esto es recomendable consumirlo lo antes posible.
El fundamento extra: la limpieza
La limpieza de los utensilios que se utilizan en la preparación del café es fundamental, ya que si bien es cierto que se debe tener en cuenta la proporción, el molido, el agua y la frescura. Es igual de importante mantener las maquinas de cafés limpias y a buen resguardo.
De lo contrario, los aceites se pueden enranciar y esto puede repercutir en el sabor final del café, igualmente se deben limpiar las cafeteras de filtro. Para que la elaboración del café sea efectiva.
Sin duda los fundamentos del café son necesarios, para lograr una buena taza de café, por lo cual su importancia es total.