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¿Cómo bajar grasa abdominal? Secretos al descubierto
Seguramente alguna vez te has preguntado cómo bajar grasa abdominal. A su vez, es probable que te sientas frustrado cuando los resultados no son lo que esperabas.
Muchas veces caemos en rutinas o dietas que no sirven de nada, es por ello lo oportuno un cambio rotundo. A continuación, hemos traemos para ti unas claves infalibles para bajar de peso, y deshacerte de esa grasa abdominal.
¿Cómo bajar grasa abdominal? El paso a paso
Para entender cómo bajar grasa abdominal, lo primero es recordar que existen tres pilares fundamentales. En definitiva, cada uno de ellos marcará la diferencia en pro del objetivo que quieres alcanzar.
Ejercicios bajar grasa abdominal
El primer error común al querer eliminar grasa abdominal es una mala orientación del ejercicio. Hoy en día, se tiene la falsa creencia en que UN ÚNICO tipo de actividad física es suficiente.
Por ejemplo, no es cierto que con solamente practicar abdominales, tendrás la panza esbelta. Está comprobado científicamente que la grasa no puede quemarse de manera localizada. Ni tampoco existe un único ejercicio que se enfoque o especialice en una zona del cuerpo.
Por tal motivo, es trascendental armar una rutina física equilibrada. Aquella en la que el objetivo sea disminuir el peso corporal global, sin creer que la grasa abdominal es lo único relevante.
Lo ideal es empezar de menos a más. Apertura con días de trote estacionario, seguido de recorrido a la manzana. Con el tiempo, aumenta los kilómetros a recorrer. En definitiva, gracias a la actividad cardíaca intensa, la eliminación de grasa será rápida.
Otros ejercicios como la bicicleta o bicicleta estacionaria sirven en un alto porcentaje. De hecho, es posible alternarla junto con el trote para no caer en rutinas pesadas.
Dieta bajar grasa abdominal
Comprender cómo bajar grasa abdominal pasa por la estructuración de una buena dieta. El ejercicio no funcionará ni alcanzará su máximo potencial si, después de una atareada rutina, no se complementa con buena alimentación.
Normalmente, la grasa abdominal se acumula por un exceso de peso. Asimismo, la ganancia de kilos de más es derivada de un consumo extra de calorías mucho mayor al que se necesita diariamente.
Cuando la glucosa (azúcar) adquirida de la dieta sobrepasa los límites metabólicos, se almacena a modo de grasa. A raíz de ello, el régimen alimenticio está dirigido a controlar la ingesta de hidratos de carbono. Elementos que no solo aportan energía de primera mano, sino azúcar.
Otro punto de inflexión es reducir el consumo de grasas saturadas y comidas ultra procesadas. Al mismo tiempo, es imprescindible romper relaciones con los refrescos, frituras, golosinas, snacks y comida rápida en general.
Por último, se debe disminuir la ingesta calórica hasta niveles de déficit seguro. Para ello, es bueno acudir a un nutricionista especializado que promocione una dieta para la saciedad con la menor cantidad de calorías en el platillo.
Descanso y sueño
Eliminar la grasa abdominal con ejercicio y dieta tampoco será una realidad sin descanso y sueño oportuno. Durante horas nocturnas, el cuerpo humano repone la energía gastada, así como realiza sus procesos metabólicos propios del sopor.
Si estás efectuando una rutina de ejercicio, lo recomendable es reposar el grupo muscular trabajado por mínimo 24 horas. Por su parte, las sesiones de trote o de bicicleta deben ejecutarse interdiariamente para prevenir la fatiga muscular.
Por último, se establece que un buen sueño es aquel que se prolonga entre 7 a 8 horas. En ese sentido, el momento idóneo para dormirse es entre las 9 a 10 de la noche. De allí en adelante, es probable que el ciclo fisiológico de la melatonina, implicada en el descanso, se altere.
En efecto, es una situación que se traduce a un tipo de insomnio poco favorable. No solo no se descansará apropiadamente, sino que, al día siguiente, la fatiga se sentirá el doble de lo normal. Así que, por tal motivo, no descuides este pilar fundamental.
