Escuche esta historia
--:--
4:46
Aprende a llevar una vida equilibrada con estos consejos
Una vida balanceada va de la mano con diferentes rituales diarios, los cuales nos ayudan a mantener en orden nuestra mente.
Estos hábitos también conocidos como "rutinas diarias", nos ayudan a mantener nuestra vida en completo orden, además de equilibrar nuestra mente, con lo que sucede a nuestro alrededor.
Cuidar nuestro cuerpo y nuestra salud mental, debería ser una de nuestras primeras preocupaciones.
En ocasiones olvidamos que algunas de estas rutinas, también pueden ayudarnos a generar bienestar incluso estando en nuestro sitio de trabajo.
Para ello existen algunas tareas, costumbres y acciones que podemos llevar a cabo para así mantener a nuestro cuerpo y mente en perfecto equilibrio.
¿Cómo influyen la alimentación en nuestro cuerpo?
Siempre escuchamos que una alimentación sana hace a un cuerpo sano, y es totalmente cierto. La alimentación es base fundamental de nuestra salud, si queremos estar sanos debemos prestar atención a como nos estamos alimentados.
En ocasiones la alta demanda laboral hace que nos saltemos algunas comidas, o que compremos algo en la calle, es por ello que debemos cuidar lo que consumimos, y mantener buenos hábitos.
Forma de alimentarse para encontrar el equilibrio
En el desayuno:
Está en la primera comida del día, es la que nos dará fuerzas para comenzar las labores diarias y por eso debemos prestarle gran atención.
Las frutas son un gran aliado para los desayunos, están llenas de vitaminas que energizaran tu cuerpo, por lo que puedes desayunar una taza de avena con algunas frutas de tu preferencia.
Es muy importante que no nos saltemos el desayuno, ya que este puede traer consigo consecuencias desfavorables para nuestra salud, como la propensión al aumento de peso, menos energía y un bajo rendimiento.
La merienda
En ocasiones olvidamos lo importante que es comer algo sano entre comidas. Esto ayuda al cuerpo a mantener el nivel óptimo de energía y reduce el riesgo de tener atracones de comida, poco saludables.
Nuestra merienda no tiene por qué ser aburrida, entre las opciones puedes optar por:
Barras nutritivas
Frutos secos
El yogurt con frutas
Te recomendamos evitar el consumo de comidas sobre procesadas o aquellas que vengan directamente de la máquina expendedora, ya que traen grandes cantidades de grasas y calorías, además de muy pocas vitaminas.
Durante el almuerzo
Es esencial hacer un descanso de nuestras labores y tomarnos un tiempo para comer.
Posponer la hora de la comida hace que el cuerpo entre en alarma y almacene grasa para poder mantenerse.
Así como es importante la hora en la cual comemos, también debemos darle importancia a aquello que consumimos.
Las porciones de nuestro almuerzo deben estar distribuidas de manera balanceada, conteniendo una buena porción de vegetales y proteína, la cual no debe ser mayor al tamaño de la palma de nuestra mano.
También puedes usar a la hora de preparar tu comida, muchas más especias en lugar de sal, con el fin de disminuir la cantidad de sodio dentro de nuestros platillos.
Un dato extra es que siempre debes mantener tu cuerpo hidratado. Lo ideal es mantener siempre una aliementación saludable.
Recurre a la actividad física diaria
Nuestro cuerpo necesita movimiento, y que estemos en el trabajo no es un impedimento para ello. Puedes salir a caminar un rato durante la hora de descanso y si es al aire libre mejor.
Otra decisión pequeña, pero importante, puede ser subir las escaleras en lugar de tomar el ascensor.
Incluso puede hacer sesiones de estiramiento en la oficina. Cambia la posición en la que estás sentado, para que se active la circulación de tu cuerpo.
Así podrás disminuir la probabilidad de sufrir dolores de espalda y cabeza. Luego de dos horas de periodos, sin movimiento es importante cambiar y activar el cuerpo. No olvides descansar la vista.
Cuida tus emociones
Compartir espacios con otras personas favorece a nuestra salud emocional, somos seres sociales, si tomamos un momento para compartir con nuestros compañeros el ambiente laboral será más agradable y beneficioso.
Ser eficiente es importante, pero sobre exigirte es dañino, debemos estar conscientes y poner límites.
Cuando un proyecto exige demasiado está bien tomar pausas para relajarnos y despejarnos, pasar muchas horas seguidas en una misma actividad nos hace propensos a fatigarnos.
Aprender a identificar cómo te sientes es crucial para tu bienestar, practica técnicas de relajación y reduce el estrés.
Para que no te sientas desbordado, tener una buena organización es vital, distribuye tu tiempo en las actividades prioritarias y considera descansos entre tareas.
¿Se te ocurre algo más para poder apoyar de manera positiva tu salud mental?
